El pasado viernes, día 18 de los corrientes, tuve el placer y el privilegio de acudir con unos compañeros del Movimiento Social Canario, a escuchar el pregón de inicio de las Fiestas Patronales de Los Giles.
Las Palmas de GC, 21 de junio de 2010 | Opinión | José María Barrientos (Movimiento Social Canario).
Digo lo del privilegio porque, a parte de que me encanta visitar este pueblo, en el que me encuentro como en mi casa, el pregonero no era otro que el ilustre historiador y antropólogo Juan Francisco Santana Domínguez, al cual profeso no solo una gran estima y amistad, sino que le sigo en sus innumerables escritos, artículos y libros, en su empeño de preservar nuestro patrimonio histórico y cultural de tanto intento de expolio y barbarie.
También es conocida su lucha por restituir al antiguo municipio de San Lorenzo su dignidad y derechos, que no son otros que el reconocimiento por los distintos estamentos implicados, de unos hechos probados que hablan del expolio a estos pueblos del municipio de Las Palmas de Gran Canaria, de su Carta Municipal y el homenaje a unos políticos valientes, que supieron luchar hasta la muerte por unos derechos de sus conciudadanos que les querían ser arrebatados a la fuerza, anexionando el pueblo al municipio capitalino, por intereses puramente económicos y mercantilistas.
Durante la lectura del pregón, mientras Juan Francisco iba desgranando la historia del barrio, por supuesto muy ligada al citado ex municipio de San Lorenzo, al que perteneció hasta su anexión al de Las Palmas de Gran Canaria, me vino a la cabeza (deformación política) la lucha que el movimiento vecinal de “Tamaraceite Si”, tiene planteada contra el Ayuntamiento de la Capital de la Isla, cuya plataforma lidera y conduce un ilustre vecino y amigo del pueblo de Tamaraceite: Juan Manuel Calderín, que con su esfuerzo y su trabajo, ha hecho que numerosos colectivos se aglutinen en torno a la idea de defender para aquel barrio una zona comercial abierta, un corredor verde y agrícola que es lo tradicional de aquel lugar, un urbanismo razonable y, en definitiva, un distrito sostenible, como ellos mismo dicen, frente a la voracidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y muy especialmente de su Concejal de Urbanismo Néstor Hernández.
El bueno de Néstor, saltó a los medios de comunicación el pasado mes, con gran revuelo y alegría porque su grupo de gobierno, “había conseguido desbloquear” el plan Tamaraceite Sur, lo que era, sobre todo para el, que por supuesto no para los vecinos del distrito, una gran noticia, ya que el convenio urbanístico, incluía una compensación a las arcas municipales de ocho millones de euros, quiero recordar.
Es decir, que nuestro concejal más famoso, posible sucesor del actual alcalde Sr. Saavedra, cambia todo el enfoque urbanístico de una zona magnífica de la ciudad por ocho millones de euros en compensaciones de un promotor particular. ¡Juro que no lo entiendo!
Me explico.
Aparte de que en la famosa modificación del Plan Parcial de Tamaraceite Sur, que tanto alegraba a nuestro concejal estrella Néstor Hernández, hoy recurrida por los vecinos, no se aporta nada bueno para los ciudadanos de la zona, me tengo que seguir preguntando cosas:
¿Cómo queda el comercio local de Tamaraceite, cuando usted le coloque un centro comercial de 80.000 metros cuadrados al lado D. Néstor?
¿Es necesaria esa infraestructura comercial en la zona ahora D. Néstor?
¿Cómo se van a resolver los temas dotacionales en la zona D. Néstor?
¿Cree que es necesario masificar esa zona, cuando todavía hay viviendas sin vender en zonas limítrofes como 7 Palmas D. Néstor?
¿Admite usted que es un despilfarro tirar al suelo con su piqueta el intercambiador de la zona, nuevo y todavía sin inaugurar, que costó más de 5 millones de euros D. Néstor, con la de parados que hay en nuestra ciudad y con la de gente necesitada de ayuda que aumenta día a día por la incompetencia del Ayuntamiento para gestionar las ayudas de emergencia social?
No se en que pensaban ustedes, D. Néstor y su grupo de gobierno municipal, cuando aprobaron ese Plan Parcial de Tamaraceite Sur, con toda la oposición en contra y doña Nardy con su “chollete”, como dijo el señor Saavedra, pero desde luego en las futuras generaciones de vecinos de Tamaraceite, no.
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