Nace Canarias Investiga

Canarias, 27 de febrero de 2011 |Opinión | Carlos Guerra.

Es un placer anunciarte la puesta en marcha del períódico digital Canarias Investiga, una redacción de noticias independiente, sin ánimo de lucro, enfocada al periodismo de calidad y de interés público. Han sido cuatro meses de intenso trabajo que ha tomado un mes más de lo anunciado, pero entiendo que lanzar un medio de comunicación no es algo que se pueda tomar a la ligera. En este tiempo hemos tenido numerosas reuniones, y en algunas de ellas han surgido ideas que han sido incorporadas al adn de Canarias Investiga.

Las vibraciones son buenas. En todo este tiempo he constatado un deseo claro de cambio, un anhelo de mejoras en el panorama de los medios. Ese sentimiento ha sido unánime todo el tiempo, desde periodistas hasta gente de la universidad, pasando por economistas, científicos y líderes sociales. Ustedes representan buena parte de la intelectualidad de nuestras islas, de ahí mi interés por conocer qué echaban en falta en la actualidad y cómo imaginaban este nuevo medio de comunicación. Ni que decir tiene que la experiencia ha sido excelente.

Ahora empezamos el trabajo real, y mi mayor deseo es no defraudar las expectativas. Nuestro estilo de trabajo es claro, y parte del interés del público. En otras palabras, queremos estar en la calle. No queremos aislarnos en una burbuja de datos y oficinas. No quisiéramos repetir la situacíón denunciada por Fred Friendly, el histórico presidente de CBS News, cuando acusaba a la prensa italiana de comienzos de los años 90 y que pudiéramos trasladar aquí y ahora: "Os habéis buscado demasiados aliados, demasiados recorridos seguros dentro de las diferentes ciudadelas del poder y os habéis alejado demasiado de la opinión pública. Ahora os sentís aislados y rechazados. Pero los demás (la opinión pública, la gente) no os conocen, por lo tanto desconfían, o permanecen ajenos a la discusión", decía Friendly.

Hoy comienza el trabajo real, el periodismo, el reporterismo. Y tenemos buenos ejemplos también entre nosotros. La crisis del papel y de los medios es un asunto circunstancial. La gente, el público, sigue queriendo leer buenas historias, así fue desde Herodoto y sus crónicas de las guerras Médicas hasta hoy. No me cabe la menor duda. Sin el público, nuestro trabajo no tiene sentido, como no lo tiene el cine sin espectadores, como aclaró Álex de la Iglesia en la gala de los Goya. Cuando Libia consiga expulsar a Gaddafi de poder, cuando Túnez y Egipto den sus primeros pasos en democracia, se empezarán a contar historias, y los lectores querrán saber. Y si los lectores están ahora más diseminados que hace diez años -redes sociales, etc-, tendremos que plantearnos la manera de recuperarlos. Porque el público sigue ahí, esperando que le agarremos del cuello con una buena historia Por tanto, recuperemos al público. Hagamos buenas historias, trabajadas, con rigor, y bien escritas. Ese es nuestro reto. Esa es, hoy, nuestra exigencia.