Palafrugell (Girona), 12 de febrero de 2012 / Cartas al Director / José Morales Martín.
Dos grandes personajes franceses definían la envidia como “este vicio no es más que una declaración de inferioridad”, lo decía Napoleón, mientras que Víctor Hugo describía al envidioso como “un ingrato que detesta la luz que le alumbra y calienta”. Con ellas no quiero decir nada pero sí que tal vez demuestran a que nivel han llegado algunos compatriotas de estos grandes franceses. Y es que la absurda campaña emprendida por algunos medios galos, en especial la cadena de televisión Canal Plus, contra los deportistas españoles al socaire del “caso Contador”, simplemente demuestra que se tarta de “una declaración de inferioridad”. Pienso que sólo la envidia ha llevado a esos medios a desencadenar una auténtica campaña de descrédito sobre los grandes deportistas españoles, desde Rafael Nadal a los hermanos Gasol pasando por Iker Casillas y las distintas selecciones nacionales que triunfan por todo el mundo. Todo porque un triple vencedor del “Tour” de Francia, Alberto Contador, ha sido sancionado por un supuesto caso de dopaje en dosis infinitesimales, cuyo origen no ha podido probarse y que tampoco pudo tener efectos en el esfuerzo deportivo. En este caso puede aplicarse el refrán “a quien nada vale nadie le envidia” y el otro “si la envidia fuera tiña, cuantos tiñosos habría”, en este caso, para no infectarnos, las autoridades sanitarias españolas debería cerrar las fronteras con el país vecino.
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