El Derecho a saber

30 de agosto, Día Internacional de los Desaparecidos

Cada año, los conflictos armados, las catástrofes naturales y las migraciones separan a numerosas familias que sufren al no poder contactar con sus seres queridos, o por desconocer su paradero.

En 2011, Cruz Roja Española ha atendido más de cuatrocientas demandas de búsqueda que afectan a unas novecientas personas.

Madrid (España), 30 de agosto de 2012 / Cruz Roja - Desaparecidos / Gabinete de Prensa.

Cada año, los conflictos armados, las catástrofes naturales y la migración separan a numerosas familias que sufren terriblemente por no poder contactar con sus seres queridos ni tener noticias de ellos. El bienestar de las personas y su capacidad de afrontar las crisis dependan en gran medida de la posibilidad que tengan de mantenerse en contacto con sus familiares. De conformidad con el Derecho Internacional Humanitario y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos “las personas tienen derecho a saber qué ha sido de un familiar desparecido”.

En el Día Internacional de los Desaparecidos, Cruz Roja reafirma su compromiso de ayuda a cientos de miles de familias en todo el mundo a restablecer el contacto familiar y lanza la Campaña “No me olvides”. A través de diversos materiales de sensibilización se pretende dar a conocer la tarea que desarrolla su programa de “Restablecimiento del Contacto Familiar” y sensibilizar a la población sobre el derecho que todas las personas tienen a conocer el paradero de sus familiares.

El Servicio de Restablecimiento del Contacto Familiar (RCF) de Cruz Roja Española forma parte, junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y las Sociedades Nacionales de Cruz Roja y de la Media Luna Roja, de una extensa red mundial de ayuda a familiares de desaparecidos que abarca un amplio abanico de actividades y cuyo objetivo es impedir las separaciones y las desapariciones, restablecer y mantener el contacto entre familiares y esclarecer la suerte que han corrido las personas dadas por desaparecidas. Estas tareas suelen ir acompañadas de ayuda psicológica, jurídica y material para las personas y familias afectadas, programas de reasentamiento y reagrupación familiar.

Para que el RCF funcione es imprescindible estar cerca de las personas afectadas. La presencia en 187 países de todo el mundo de la Red de Restablecimiento del Contacto Familiar de Cruz Roja garantiza esta cercanía.