Palafrugell (Girona), 26 de septiembre de 2015 / Cartas al Director / José Morales Martín
Uno de los actos centrales de la visita de los Reyes de España a Estados Unidos ha sido el encuentro de Felipe VI con el Presidente Obama, que ha servido para certificar el prestigio internacional de nuestro Rey.
La alusión de Barack Obama al compromiso de Estados Unidos de “mantener la relación con una España fuerte y unida” no es solo una redonda frase hecha, sino que expresa una conciencia de la comunidad internacional ante el desafío secesionista en Cataluña.
Los grandes temas que ocupan la agenda internacional, que inciden decisivamente en la paz global, no han faltado en un encuentro en el que la sintonía se percibía en las palabras y los gestos.
La seguridad mundial, el desafío de los flujos migratorios, y los problemas relacionados con el hambre en el mundo y las condiciones de los desplazados, han ofrecido al encuentro entre ambos mandatarios una dimensión social que es clave en el deseo de construir, entre todos, un mundo mejor.
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