Baños de Valdearados (Burgos - España), 19 de agosto de 2016 / Cartas al Director / Domingo Martínez Madrid
Un detallado estudio de las estadounidenses National Academies of Sciences, Engineering and Medicine (NAS) sobre los cultivos transgénicos contradice la afirmaciones que se han hecho desde ciertas corrientes ecologistas. En el informe el comité de la NAS hace una clasificación de los posibles efectos en tres áreas: la salud humana, el medio ambiente y la agricultura.
Respecto a la primera, el comité señala haber buscado "cuidadosamente" alguna evidencia de daño atribuible al consumo de alimentos derivados de cultivos genéticamente modificados. No se halló ninguno. No hay datos epidemiológicos que demuestren un vínculo entre ninguna enfermedad o padecimiento crónico y el consumo de transgénicos. Por el contrario, existe evidencia de que reportan beneficios a la salud, al reducir los riesgos de intoxicación por fitosanitarios, o al permitir el enriquecimiento nutricional del arroz con beta-carotenos, lo cual ayuda a prevenir el déficit de vitamina A en varios países en desarrollo.
Otros beneficios de los cultivos transgénicos serían para el medio natural. A la objeción de que esos cultivos pueden atentar contra la biodiversidad, los investigadores de las NAS oponen el comprobado aumento de la diversidad de insectos allí donde se aplican, gracias al menor uso de productos fitosanitarios.
En cuanto a la agricultura, los expertos apuntan que, aunque los cultivos transgénicos han reportado beneficios económicos a muchos pequeños agricultores en los primeros años de su introducción, la sostenibilidad y el aumento de esas ganancias dependerán de que esos trabajadores reciban apoyo institucional en forma de créditos y suministros asequibles, como los fertilizantes, así como en acceso a los mercados locales y globales.
Los hechos demuestran, según el estudio, que en los sitios donde se han sembrado transgénicos resistentes a los insectos, pero no se han seguido estrategias enfocadas en esa resistencia, los insectos pueden desarrollar cierta inmunidad a ella. "Si los cultivos transgénicos van a usarse de modo sostenible, se precisan regulaciones e incentivos para trazar estrategias de manejo de las plagas que sean económicamente factibles", señalan las NAS. Yo no me atrevo a decir más.