Palafrugell (Girona), 19 de mayo de 2014 / Cartas al Director / José Morales Martín
Todo atentado contra la libertad religiosa y contra la libertad de religión supone una quiebra de humanidad y un fracaso en el progreso auténtico de la historia. Ante el permanente goteo de atentados contra los cristianos (Pakistán, Mali, Kenia, Siria, Nigeria, Sudan, etc.), la verdad de lo que está ocurriendo exige que las víctimas sean las protagonistas de la historia, que no se extienda la mancha de temor a decir el nombre de los responsables de los atentados sin encubrimientos y que la justicia sea el freno contra este martirio de nuestros días.
La visita que en su día hizo el Papa Benedicto XVI al Líbano supuso una llamada universal a la paz, al respeto integral de la dignidad humana y a la esperanza, pero pienso que no es suficiente, se nota a faltar una clara reacción de la Comunidad Internacional. No es de extrañar que muchos nos preguntemos ¿Dónde está la ONU, dónde la OTAN, dónde la Alianza de Civilizaciones, dónde…?