Poco más de un mes queda para las elecciones generales y la verdad es que puede parecer incomprensible que muchos jóvenes se debatan entre ir o no ir a votar, ya la disyuntiva no es a quién votar. Digo incomprensible porque el sistema electoral no ha cambiado y pase lo que pase sea cual sea el índice de participación en las distintas cámaras se van a repartir los mismos escaños entre las fuerzas políticas más votadas de cada territorio.
Los culpables de esta situación en gran medida han sido las distintas fuerzas políticas con mayor representación en las Cortes; los ciudadanos tienen una sensación de hartazgo, no ha habido iniciativas para poder escapar de esta situación económica, las directrices marcadas desde el estado llegaron tarde y mal, fuimos tutelados desde la unión europea y las fuerzas políticas con más representación en las distintas cámaras sólo supieron ponerse de acuerdo para cercenar la participación a los ciudadanos y para seguir políticas económicas neoliberales.
En Canarias la situación es peor, nuestras cifras de desempleo superan la media estatal y es totalmente seguro que no mejoraremos la situación económica sin ayuda, Canarias con sus propios recursos y medidas a tomar desde las distintas instituciones locales no mejorará la situación actual sólo nos quedará esperar sino existe una intervención del estado coordinada y eficaz a la pérdida de calidad de vida y del estado del bienestar que conocemos.
En este punto me pregunto como liderarán estas medidas coordinadas y eficaces los parlamentarios y los senadores de los partidos estatales por Canarias exigiendo a su vez esas intervenciones en los distintos sectores productivos para que nuestra comunidad canaria avance, cuando ni siquiera abanderan iniciativas de menor calado que afecten a nuestra tierra. Estos representantes públicos sin quererlo probablemente son actores secundarios de unas potentísimas maquinarias al servicio de Rajoy y Rubalcaba que no les permiten mirar por Canarias, están sujetos a unas directivas marcadas desde Madrid que no reflejan el sentir y la situación muy delicada que atravesamos en esta Tierra.
Me pregunto a 1500 kilómetros de la capital del estado español que podemos hacer en Canarias para cambiar esta realidad. Debemos tener un grupo nacionalista fuerte en Madrid como ocurre en otras comunidades autónomas que nos garantice que Canarias esté en lo más alto de la agenda del Gobierno del Estado y que consiga que Canarias cuente con una posición firme e independiente. En este punto Nueva Canarias – Coalición Canaria han unido sus fuerzas para poder contar con una voz propia en Madrid que garantice un trato diferenciado en base a esta crisis y que las políticas que se apliquen se adapten a las demandas de un territorio marcado por la dependencia exterior y su condición ultraperiférica.
Los y las jóvenes tenemos un papel determinante en estas elecciones generales, acudimos a esta cita con desmotivación, pocas perspectivas de inserción laboral y pendientes de un hilo al sentir que los recortes sociales son los más “fáciles” para los partidos mayoritarios, la enseñanza peligra en un estado que piensa que la educación no ha permitido el avance y la prosperidad, donde se pliega a las agencias de calificación económica como motor de progreso, tenemos que diferenciarnos en Madrid del PP y PSOE con un grupo propio para no caer en sus políticas en las que la economía mueve el mundo y no las personas formadas, independientes, atendidas en sus prestaciones básicas, libres y con oportunidades.
En definitiva, en estas elecciones se decide, ante todo, si canarias va a contar o no en las políticas de Estado a partir del 20 N. Sin una presencia sólida que pueda conformar un grupo nacionalista canario en las cortes, canarias no cuenta. Nueva Canarias – Coalición Canaria estamos unidos por Canarias para conseguirlo.
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