Sant Feliu de Guíxols (Girona), 3 de mayo de 2015 / Cartas al Director / Pedro García
La semana que viene van a comenzar las sesiones en el Parlamento andaluz en las que Susana Diaz va a intentar ser investida como presidenta de la Junta. Lo que sucede en Andalucía va a ser un test sobre la actitud de Ciudadanos y de Podemos, las dos formaciones emergentes.
El PP ya ha dejado en claro que va a votar en contra de esa investidura. Así que Díaz solo será nombrada presidenta si Ciudadanos o Podemos le apoyan o se abstienen. Hasta ahora Ciudadanos y Podemos han exigido un compromiso muy claro en la lucha contra la corrupción. Albert Rivera reclama que Chaves y Griñán pongan por escrito su renuncia. Griñán ya ha dicho que se marcha, pero de momento Chaves lo único que ha asegurado es que no se presentará la próximas elecciones. ¿Le basta a Ciudadanos que Chaves ponga por escrito que esta es su última legislatura?
Si Rivera vende demasiado barato su apoyo, Ciudadanos perderá el crédito que ha ido acumulando. Rivera arriesga mucho en Andalucía, donde los socialistas están siendo investigados, no lo olvidemos, por el mayor caso de corrupción de la historia de la democracia.
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