Girona (Cataluña - España), 29 de diciembre de 2015 / Cartas al Director / Enric Barrull Casals
El Arzobispo de Madrid dirigía, el pasado año, una carta a los sacerdotes y familias de la diócesis, en la que les recordaba que “la belleza y la verdad de la familia, iglesia doméstica, comunión de vida que nace del don fiel e indisoluble de los esposos, sellado por la presencia y el amor de Jesucristo, corresponde al deseo más profundo arraigado en el corazón de cada persona. El Señor hace posible que el hogar esté fundado sobre roca (cf. Mt 7, 24-27) y sea imagen viva del Hogar santo de Nazaret. Por eso, el Evangelio de la familia es y será siempre una buena noticia para el mundo, y una fuente de alegría para todos”.
Explicaba también que “La alegría del Evangelio de la familia” sería un motivo para dar gracias a Dios por el don de cada familia y pedir a la Sagrada Familia de Nazaret por todos los hogares de nuestras comunidades.
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