jueves, 1 de julio de 2010

La Derbi Mulhacén 125 se actualiza en su versión de 2010

Nuevas gráficas, unas llantas de 17’’ y acabado en color gris


Con nuevas gráficas y un elegantísimo acabado en color gris, la versátil Derbi Mulhacén 125 se renueva para seguir siendo ese concentrado de fiabilidad y tecnología que asombró al mundo con su diseño peculiar y atrevido. La marca española dependiente del Grupo Piaggio ha anunciado su inmediata comercialización y Salón Mercurio, concesionario oficial Derbi en Las Palmas de Gran Canaria, dispondrá de ella en breve.

Las Palmas de Gran Canaria, Jueves 1 de julio de 2010 | Motor |Gabinete de Prensa.
Toda su esencia permanece intacta, sólo cambia levemente su decoración en lo que respecta a las gráficas –sutilmente actualizadas- y la presencia de un nuevo acabado en color gris que estiliza la escasa carrocería de la Mulhacén. Derbi prendió la mecha de este modelo revolucionario dentro de su gama en 2006. La idea era refundar el concepto de las scrambler de los años setenta, aprovechando su versatilidad pero también ese diseño tan peculiar. Aquella primera Mulhacén montaba un motor de 659 cc y fue muy premiada incluso antes de su lanzamiento.

La versión que ahora se renueva comenzó su camino en 2007. Misma base, mismo concepto, pero con un motor de 125 cc 4T de 15 CV de potencia, cuatro válvulas, doble árbol de levas en cabeza y un eje de equilibrado para suprimir vibraciones. Un motor diseñado para ir al unísono con el carácter de la Mulhacén: suave y relajado.

El manillar ergonómico y el asiento procuran una posición de conducción muy confortable, mientras el bastidor y sus cotas (una distancia entre ejes de 1.326 mm) busca una equidistancia entre agilidad y estabilidad. En suma, una moto perfecta para ciudad y muy capaz para trayectos interurbanos de media distancia. La Mulhacén es ideal para nuevos pilotos, sobre todo porque se puede conducir con el carné B y or su ligereza, tan sólo 110 kg. Para noveles y también para los que valoran el alto componente en diseño y el obsesivo cuidado de los acabados, otro de los signos distintivos de este modelo desde su primer lanzamiento y que se puede apreciar en detalles como el cuadro digital o las tapas totalmente personalizables.

La versión 2010 incorpora unas nuevas llantas de 17’’ y ese color gris que se suma a los rojo y negro de la Mulhacén Café. Los precios se mantienen intactos, es decir, 3.125 euros para la versión base y 3.499 euros para la variante ‘café’.

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