Girona, 3 de julio de 2010 | Cartas al Director | Jesús Domingo Martínez.
El pasado día 25 de marzo leía “El Santo Padre pide que se promocione una ‘nueva sensibilidad social’ hacia la vida humana”. El Papa Benedicto XVI pidió promocionar una "nueva sensibilidad social" hacia la vida humana, un "don" que hay que "salvaguardar desde la concepción hasta la muerte natural", decía la nota.
Me uno con todo el corazón a los que emprenden diversas iniciativas en favor del respeto por la vida y por la promoción de la nueva sensibilidad social. Me adhiero a la manifestación por la vida que tendrá lugar el próximo sábado, justa un día ante de entrar en vigor la ley del aborto libre. En un contexto cultural en el que muchas personas consideran el matrimonio como un contrato temporal que se puede romper, es de vital importancia comprender que el amor verdadero es fiel, entrega definitiva de sí mismo. Animo a las nuevas generaciones a descubrir "la grandeza y la belleza del matrimonio", lugar óptimo para el desarrollo y maduración de toda nueva vida.
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