PROYECTO DE MOVILIZACIÓN DE LA COMUNIDAD LOCAL EN LA RESERVA DE LA BIOSFERA DE GRAN CANARIA

En los siete municipios que la integran: Agaete, San Bartolomé de Tirajana, Artenara, Tejeda, Mogán, La Aldea de San Nicolás y Vega de San Mateo


Más de 1.100 personas han formado parte de las acciones de sensibilización sobre los valores de Gran Canaria como Reserva de la Biosfera


Entre los problemas detectados por Aider Gran Canaria se encuentra el envejecimiento poblacional y el deseo de la juventud, si las cosas no cambian, de emigrar a zonas más pobladas


La población de la zona considera factible que una adecuada gestión de la Reserva de la Biosfera tenga efectos beneficiosos


Durante este año se han impartido talleres destinados a poner en valor las producciones locales dentro del ámbito de la Reserva, dando a conocer la potencialidad de la cultura y la agro biodiversidad local

Gran Canaria, 18 de mayo de 2011 | Medio Ambiente | Gabinete de Prensa.

Más de 1.100 personas han formado parte hasta ahora de las actividades de divulgación y sensibilización sobre los valores de Gran Canaria como Reserva de la Biosfera, desarrolladas por Aider (Asociación Insular de Desarrollo Rural de Gran Canaria) en los siete municipios que la integran: Agaete, San Bartolomé de Tirajana, Artenara, Tejeda, Mogán, La Aldea de San Nicolás y Vega de San Mateo. Las reservas de la biosfera, impulsadas por la UNESCO, pretenden conciliar la protección de la biodiversidad con el desarrollo económico y humano. Para Aider, pertenecer a un territorio Reserva de la Biosfera “es un privilegio que no debemos desaprovechar”. Asegurando que para su correcta gestión “no sólo es necesario conocer el territorio y sus recursos ambientales, sino sobre todo las inquietudes, esperanzas y dificultades de las personas que habitan en él”. Sin duda, es un ejemplo de convivencia entre el ser humano y el medio que habita.

El proyecto, titulado ‘Movilización de la Comunidad Local en la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria’ comenzó a desarrollarse en enero de 2010. Junto a la tarea de sensibilización se ha llevado a cabo una promoción masiva, a través de grandes paneles colocados en los municipios que integran la Reserva y que versan sobre el significado de las Reservas de la Biosfera a nivel mundial y sobre las características específicas de la de Gran Canaria.

Asimismo, se han distribuido 8.000 folletos que destacan la importancia que la Reserva de la Biosfera tiene para Gran Canaria, cómo se gestiona y cuáles son los contenidos fundamentales del Plan de Acción del Cabildo de Gran Canaria para la Reserva.

Mediante las acciones de divulgación y sensibilización selectiva, en las que han participado 1.100 personas entre adultos y escolares, se ha conseguido trasladar a la población algunos conceptos básicos en torno a los que gira el concepto de Reserva de la Biosfera, con el fin de que puedan crearse una opinión cualificada y, de esta manera, participar activa y eficientemente en el proceso.

Inquietudes y demandas

A través de distintas acciones se ha intentado conocer las inquietudes y demandas de la población, así como la detección de prácticas sostenibles tradicionales en la Reserva. Entre las dificultades encontradas figuran problemas en las comunicaciones, escasez de agua en algunos de los puntos de la Reserva, abandono de cultivos y pérdida de cultura agrícola. Igualmente, el envejecimiento de la población y el deseo de la juventud, si las cosas no cambian, de emigrar a zonas más pobladas.

Sin embargo, consideran factible que la Reserva de la Biosfera, y una correcta gestión de la misma, pueda tener efectos beneficiosos para la zona. Y, de hecho, han aportado multitud de sugerencias para mejorarla. Entre otras, la gestión de una marca de calidad para los productos y servicios que se producen en la zona; y mayores recursos hidráulicos y contratos territoriales agrarios para subvencionar a los agricultores y evitar que estos abandonen sus cultivos.

Actividad forestal

Asimismo, apuestan por el control de especies invasoras, tanto de fauna como de flora; por la creación de una red cultural auspiciada desde la Reserva de la Biosfera, donde se dé impulso a toda la actividad cultural de los habitantes de la zona; y, por último, se muestran favorables a considerar la actividad forestal como un potencial económico a explotar.