Santa Cruz de Tenerife, 14 de enero de 2012 / Cultura - Libros / ASSOPRESS
Es deseo del escritor, actor y cantante, emigrado a Madrid hace ya 24 años, realizar la presentación oficial de su obra en la tierra que le vio crecer. Ernesto Caballero, director del Centro Dramático Nacional, ha dicho de ella: "nos hallamos ante una obra insólita en nuestro panorama teatral".
El día 18 de enero de 2012, en el Cine Víctor de la capital tinerfeña, a las 20:00 horas, se realizará la Presentación en Canarias de la obra de teatro "La carretera", escrita por el dramaturgo, cantante lírico, actor y escritor, Carlos J. Álvarez.
En el acto se proyectará, por primera vez en la historia de la dramaturgia, un video promocional (tráiler) de la obra realizado en Tenerife por el actor y escritor Angelo Olivier, con música del músico tinerfeño elduendesuarez, quien también hará una breve exposición del texto, para pasar a hacer al autor de la obra algunas preguntas claves para el buen entendimiento de los misterios de un texto que, hasta la fecha, no ha dejado indiferente a nadie.
Posteriormente, se dará paso a la lectura de algunos párrafos especialmente significativos, así como se abrirá un cordial turno de preguntas que el autor tendrá mucho gusto en contestar.
Breve descripción de La carretera
Primero fue la muerte y luego la conciencia que dio paso al orbe. Sometidos a una fuerza implacable que llamamos vida, nos enfrentamos al devenir obligado; nos entregamos al deber fatal de llenar los instantes, de justificar los ahoras. Frente a una soledad cósmica inexplicable, los personajes de La carretera harán lo que sea por sobreponerse. Como moléculas agitándose al azar en un caldo de tedio y sinsentido, echarán mano del odio, la alegría, el absurdo, la estupidez, el insulto, la mentira, la amistad, la locura, la cobardía, la pereza, el amor increíble, la tentación del valor, la inercia... todo con tal de poder contarse algo mientras se mueven.
En este camino sin gloria, un ser habla con otro sin que sepamos nunca dónde empieza la realidad y termina la ficción, dónde el espacio físico y el espacio mental, y sin que logremos adivinar sus biografías ni el tiempo que habitan. Bajo una sucesión de presentes amenazante de ausencias, el lenguaje acudirá en su ayuda; y los proyectos soñados por su gramática, no solo llenarán de palabras sus pasos, sino que justificarán la invención de un destino al que entregarse gracias a la sesuda labor de un ingeniero que traza puentes de la tiranía a la libertad, del aquí al allí, de la mentira a la verdad, del ayer al mañana, de la tierra al cielo.
En definitiva, La carretera es una modesta fábula de la historia del universo humano, un cuento fuera del tiempo y del espacio, cuyas aventuras se ambientan por igual entre dos centurias que entre dos instantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario