El
piloto grancanario se adjudicó un nuevo podio en la categoría de Históricos en
la tercera cita del Campeonato de España de Rallys Todoterreno disputada este
fin de semana en Almería. Con este resultado se confirma como uno de los
aspirantes al título de cara a final de temporada.
Las Palmas de Gran Canaria. 30 de abril de 2012 / Deportes - Rallye / Gabinete de Prensa.
Igual que en la
Baja Andalucía del pasado mes de marzo, Carmelo Navarro y Álvaro Ortega han
vuelto a erigirse en protagonistas de la categoría de históricos en la tercera
cita puntuable para el Campeonato de España de Rallys Todoterreno. Con el
Toyota Land Cruiser HDJ-80 de del preparador madrileño JRx4 Competición, el
canario logró hacerse con la segunda posición final en la Baja Almanzora que se
ha desarrollado este fin de semana en Almería. Además, ha logrado situarse en
una más que meritoria decimosexta plaza absoluta.
Aunque esta
especialidad se caracteriza por su dureza, la prueba de Almanzora ha sido especialmente
severa con las mecánicas de los equipos participantes. Un raid en miniatura que
ha servido para dar un dibujo muy fiel de quiénes van a ser los aspirantes a
las primeras posiciones de este certamen nacional. Navarro y Ortega ya avisaron
de sus intenciones en la doble cita de hace mes y medio y en Almería han
confirmado que se sienten preparados para poder pelear por el título en una
categoría, la de Históricos, que aquí tuvo un total de cinco equipos inscritos.
En la prólogo de
Vera, de 10,2 kilómetros, el canario decidió no guardarse nada para tener una
composición de lugar clara de cuáles iban a ser sus rivales. “De los cerca de cuarenta inscritos hicimos
el vigésimo segundo mejor crono. Lo importante de esta súper especial es que
pudimos comprobar que las mejoras que JRx4 Competición ha hecho en el motor del
Toyota funcionaban de maravilla y eso nos dio mucha energía para los dos
sectores selectivos del domingo”.
Navarro salió sin guardarse nada al primer
paso por ese tramo de 130 kilómetros de pistas muy duras y repletas de trampas.
Aunque durante todo el fin de semana hubo amenaza de lluvia, el principal
problema fue el polvo que quedaba en suspensión al paso de los distintos
vehículos y que les jugó una muy mala pasada. “Veníamos alcanzando a un grupo de coches y nos vimos en medio de una
gran nube que nos dejó prácticamente sin visibilidad hacia el kilómetro 30.
Llegamos a una curva y fue imposible frenar a tiempo. En ese momento nos la
jugamos y para evitar un vuelco seguro nos fuimos hacia el barranco. Fue un
momento crítico, pero nos salió bien porque aunque perdimos muchísimo tiempo
nos salvamos de un accidente casi seguro”, explica el grancanario, que ya
fue segundo en las dos pruebas puntuables anteriores.
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