Olot (Girona), 18 de abril de 2012 / Cartas al Director / JD Mez Madrid.
En declaraciones del ex embajador de España ante El Vaticano y ex alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez, se acusaba al conjunto de la izquierda radical y, de manera muy particular, al propio secretario general del PSOE, de recurrir al “anticlericalismo casposo” que recuerda un siglo XIX “olvidado en el tiempo”, por haber afirmado en el 28 Congreso Federal del partido que si el Gobierno del Partido Popular reformaba la ley del aborto, él “se replanteará seriamente los acuerdos con la Santa Sede”.
Vázquez precisaba a este efecto que los citados acuerdos son “total y absolutamente constitucionales“, al haber sido votados en el Congreso y el Senado en 1979 después de la aprobación de la Constitución. Asimismo, ha señalado que éstos no suponen “ningún privilegio” para la Iglesia, pues el Vaticano “tiene acuerdos similares con más de 140 países, con los que mantiene relaciones diplomáticas”.
De la misma forma, recordaba que en virtud de los Acuerdos -que reformaron el anterior Concordato- “sobre la Iglesia está pesando gran parte de la atención a los sectores más necesitados o castigados por la crisis económica”. Por ello, Vázquez reincidía en que existe una “ignorancia” de lo que significan este tipo de tratados que reflejan las relaciones entre España y el Vaticano y considera que las palabras de Rubalcaba son “un latiguillo absurdo”.
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