Valladolid (Castilla y León), 7 de octubre de 2012 / Sociedad - Solidaridad / Josefa Romo Garlito
Pidieron, al Gobierno, el fin del aborto, una masacre que, sólo en 2011, se cobró, en España, la friolera de 113.000 vidas humanas. Son, ya, más de millón y medio las muertes acumuladas por aborto desde 1985, cuando se aprobó la primera ley, que dejaba impune el aborto en tres supuestos de casos límites. Hoy, con la ley de Zapatero-Aído, se estima como un derecho hasta las 14 semanas en cualquier caso y hasta por simple deseo de la madre. Como se expresó, en el Manifiesto para este evento, que leyó el Dr. Martínez Represa, médico pediatra y presidente de CIDEVIDA hasta su jubilación todavía reciente, "el aborto supone la muerte cruel y violenta de un ser humano y se cobra siempre dos víctimas: el hijo que muere y la madre que lo sufre".
Martínez Represa pidió, en nombre de todas las asociaciones convocantes, que " no se destinen fondos públicos a iniciativas que atenten contra la vida humana en cualquiera de sus fases; que se derogue la ley del aborto y se promueva una legislación que proteja la vida desde el momento de su concepción", además de reivindicar " una ley integral de apoyo a la maternidad" y que " se cree un plan de adopción nacional ágil y eficaz". Ante la escalada del aborto, las asociaciones de defensa de la vida exigen " una pedagogía pública contra el aborto, desarrollando para ello un plan integral en todos los ámbitos y muy especialmente en el de la sanidad y la educación".
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