Palafrugell (Girona), 07 de octubre de 2012 / Cartas al Director / José Morales Martín
En las operaciones antiterroristas el tiempo es clave. Una pequeña demora puede echarlas al traste. Es lo que ocurrió en el operativo de la Guardia Civil contra el entorno de ETA el anterior fin de semana. El juez Santiago Pedraz, el mismo que ha provocado el “caso del juez Pedraz” con motivo del intento de asalto al Congreso, de guardia en ese momento, tardó 13 horas en autorizar los registros de los domicilios de cuatro proetarras detenidos cuando trataban de sabotear un repetidor.
Ese retraso fue aprovechado para “limpiar” las casas de material comprometedor. Después, Pedraz los dejó en libertad bajo fianza de 2.000 euros. Se deben explicaciones. Parece que el tal juez se está alineando con quienes atentan contra el Estado de Derecho, cosa que sería conveniente revisar.
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