Olot (Girona), 9 de enero de 2015 / Cartas al Director / JD Mez Madrid
El nuevo ministro de Sanidad comprendió, en su primera intervención, que el PSOE no quiere diálogo ni compromiso, sino que sólo busca enfrentamiento y crispación por cualquier medio. Alfonso Alonso llegó al Congreso con la mano tendida y la diputada socialista Carmen Montón le tildó de “verdugo de las mujeres”. Es lo que hay en la izquierda en cuanto a la violencia de género: demagogia y cierta indignidad. Cualquiera diría que con el PSOE las mujeres no eran asesinadas. No es una cuestión de color político, sino un asunto de Estado. La instrumentalización de la tragedia por la diputada Montón, además de abochornar a su señoría, prestó un tristísimo servicio a una causa necesaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario