miércoles, 23 de marzo de 2016

¡Atención! Hay intentos de convencernos con esto de la matanza de las cabras...


Agaete (Gran Canaria - Canarias), 23 de marzo de 2016 / Artículo de Opinión / Fernando Báez - Sacerdote

... y falsos y entregados, estómagos agradecidos, o ellos mismos, andan diciendo que: las casi un centenar de cabras matadas por el cabildo -sin contar las que heridas y después de mucho padecer o sufrir, han muerto- son cabras asilvestradas; ya hemos dicho eso no es cierto: se trata de cabras libres, con dueños, marcas y cencerras, que -dicen- ponían en peligro la flora autóctona; ¿qué flora?, ¿por qué no la especifican? ¿Es acaso el cedro una flora autóctona que se los comen las cabras (¿no son del Líbano, una especie invasora?)?, ¿o la falta de agua y el excesivo sol del cambio climático los van a mantener vivos? ¿Qué protegen estos macacos?, ¿acaso pinos, tabaibas, cañas, juncos, veroles, cardos, etc.? ¿Mato las cabras para que tengamos: tabaibas, verodes, cañas, juncos y pinos? ¿Es que las cabras comen todo eso, sin morir y sin necesidad de rifles andaluces? Pero, si tenemos a los animalistas calladitos, más que en Misa, y sabemos el área de la matanza -es casi media isla- a la que eufemísticamente llaman “espacios protegidos”, como si fueran espacios protegidos toda la isla y el mar, y añaden lo de reservas: ¿reservas de qué?, ¿de cedros?, ¿reservas naturales (pues no iban  a ser artificiales o lunares)?, que ocupando Inagua, donde las retamas; Tamadaba donde los pinos; y Guguy con las tabaibas, ¿es eso lo que hay que proteger?, ¿se llama a todo eso, o a parte de eso parque (no de san Telmo ni de santa Catalina), sino parques, en los que sobran las cabras? ¿Y hacen falta los perros?.

Y ahora, la bomba: las cabras ponen en peligro: pinos, tabaibas y retamas, pero: ¿quién se chupa los dedos y se cree eso? Y llaman los alarmistas amigos del cabildo, grave riesgo el que las cabras estén donde están, y justifican a los andaluces con rifles para que acaben con ellas -dejando libres las culebras y las serpientes- a la par, que hablan -estos vendidos (o comprados)- de proyectos; pero, ¿qué proyectos ni qué ocho por cuatro, que quieren re- es decir: volver a forestar (reforestar), lo que es del todo imposible, donde pretenden engañar a Europa, donde nada pegará, pues no estamos en épocas de lluvias del pasado, ¡a ver si se enteran -que lo saben-, que todo ese intento de plantar algo, será baldío, infructuoso, inútil -y no por culpa de las cabras-, a no ser planten higueras, que sí se dan en secano y sin agua, pero estos bellacos, no quieren sino cedros, ¡hay que ser cerdos!: ¿cedros?, ¿ para qué cedros?, ¿un nuevo negocio de madera de cedros, para exportar al mundo?; ¡si no va a pegar ni uno!, si los tres que quedan colgados de sendos riscos, se mueren, por el sol y la falta de agua, ¿y van a plantar cedros? Dicen estos que han vendido sus almas al diablo, que las cabras ponen en peligro la conservación de la flora autóctona, ¡eso es mentira!, la flora autóctona existe, gracias a las cabras, que son las reinas de la biodiversidad, y gracias a ellas, tenemos lo que tenemos, y si algún día desaparecieran las cabras -cosa que no creo suceda jamás- entonces, desaparecería toda la flora posible autóctona o no.

El Padre Báez, que por favor les piden -lo repito- les pido por favor, no se dejen convencer, es mentira cuanto dicen estos enemigos de la isla y amigos solo del dinero regalado, que les alcanzarán algún pellizco, ¡faltaría más! Por eso, con disimulo, y queriendo convencer, con mentiras, ponen sus nombres y apellidos, para que les tengan en cuenta después, a la hora del reparto, y los pongan en la lista de nóminas, como un tal J. R., y ¡tantos otros!

“... ignorantes y necios... rebaño para el abismo, la muerte es su pastor...” (salmo 48). / “... las persiguen a muerte...” (salmo 142).

Una verdad como un templo:
Lo que quieren los del cabildo, es llenarse los bolsillos; y los pobres a joderse y a pagar si tienen; y si no, que vayan a robar (la voz del pueblo).

No hay comentarios: