Valladolid (Castilla y León), 25 de enero de 2014 / Cartas al Director / Lourdes Rivero Sánchez- Guardamino
Sr. Gallardón : Le felicito por su defensa de la vida ´”concebida y no nacida” que realizó el pasado 22 de enero en el Congreso de los Diputados en respuesta a la “interpelación urgente sobre la reforma del aborto” presentada por IU. En ella, aseguraba que "el verdadero progresismo es defender al más débil", y ponía de manifiesto la ”triple” decisión del TC de considerar al feto " un tercium (...), susceptible de tener mecanismos de protección”. Y que ante el conflicto de dos derechos: el de la mujer y el concebido y no nacido, el verdadero progresismo está en defender al más débil, al feto.
Siguiendo su impecable discurso, ahora me pregunto: ¿Por qué defiende, en su reforma de la ley, la excepción en los supuestos de violación y alteraciones psicológicas o físicas de la mujer? ¿Acaso un ser concebido en una violación y no nacido, pierde automáticamente su derecho a la vida? ¿Por qué les niega, usted, el derecho vital que le ampara? ¿Quieren penalizar la violación? Pues busquen mecanismos para que paguen los violadores, no el inocente, y no los dejen sueltos por nuestras calles, que es lo que están haciendo en estos momentos. Mire, Sr Gallardón: aplaudo su intervención del día 22 de enero; pero le ruego que sea coherente con su inapelable argumentación, para que muchos decepcionados votantes del PP le lleguemos a creer de verdad y comencemos a reconsiderar el voto que ya tenían perdido.