Izquierda Unida, Sí se puede y la Plataforma Pal carajo el TTIP denuncian que el Tratado deja en manos de las multinacionales la política económica de los países
IU y Sí se puede llevan al Pleno una moción conjunta para declarar Santa Cruz “municipio opuesto al Tratado Trasatlántico de Comercio e Inversión (TTIP)”
Santa Cruz de Tenerife (Canarias). 24 del mayo de 2016 / Políticas - Izquierda Unida (IUC) / Gabinete de Prensa.
La naturaleza y las consecuencias del Tratado Trasatlántico de Comercio e Inversión (TTIP en sus siglas en inglés) se han movido entre el secretismo y el oscurantismo. La ciudadanía apenas conoce qué consecuencias tendrá en sus vidas la entrada en vigor del tratado y los pocos políticos que se atreven a denunciarlo como el fin de la democracia en Europa tal y como la conocemos chocan contra un muro de silencio. Hoy, Izquierda Unida y Sí se puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz presentaron en rueda de prensa una moción conjunta que llevarán al próximo pleno de la corporación, este viernes 27 de mayo, para declarar el municipio “opuesto al Tratado Trasatlántico de Comercio e Inversión (TTIP)”.
La moción ha sido elaborada por la Plataforma Pal carajo el TTIP, colectivo ciudadano que desde hace un año y medio difunde el fondo de un tratado que “cambiará nuestra vida completamente”, explicó hoy Teresa Tarafalla, miembro de la Plataforma, quien alertó de que el tratado “no sólo supondrá la privatización de nuestra Educación y nuestra Sanidad” sino también “la de cualquiera de nuestros servicios públicos, desde el agua hasta la basura”.
Tarafalla aplaudió que Izquierda Unida y Sí se puede presenten la moción para hacer público y dar a conocer un tratado que se está imponiendo bajo la norma del secretismo. “Iniciativas así hacen accesible al ciudadano qué es el TTIP”.
Afirmó que el Tratado esconde unas clausulas absolutamente abusivas que permitirán que un “servicio que ya haya sido privatizado no pueda volver a ser público”. Las llamadas “clausulas trinquetes”, explicó el concejal de Sí se puede, Eligio Hernández, que “introducen la irretroactividad en los procesos liberalizadores”. Por estas clausulas, ahondó, “los partidos del cambio no podrían remunicipalizar servicios”, es decir, todo lo que haya sido privatizado por un equipo de gobierno anterior, permanecerá privatizado. Eligio Hernández definió el TTIP como “un cheque en blanco para lobistas y grandes corporaciones multinacionales”.
El concejal de Sí se puede alertó sobre los cambios que impondrá en la legislación española la aplicación del Tratado. “Tendremos que adaptar nuestras leyes en un proceso constituyente que dejará la modificación del artículo 135 en una mera anécdota”, dijo.
El concejal de Izquierda Unida, Ramón Trujillo, explicó que la moción llega hasta el Ayuntamiento porque la Unión Europea se niega a abordar uno de los temas más importantes para la ciudadanía europea: el acuerdo con Estados Unidos y Canadá para cerrar dos tratados que nos recortarán nuestros derechos más elementales. “Si no se debate en el Parlamento europeo, tendremos que debatirlo en los Ayuntamientos”, dijo Trujillo.
Recordó que el 6 de mayo de 2014, el Parlamento español votó contra una propuesta de Izquierda Unida para celebrar un referéndum sobre la entrada en vigor del TTIP en España. “El PP, el PSOE y UPyD se opusieron. Los patriotas hablan dentro de casa de defender a nuestro país, pero son los primeros en vender nuestra soberanía”, dijo Trujillo, para quien es inexplicable “el doble discurso de quienes hablan en casa de la defensa de la sanidad pública, de la agricultura y del medio ambiente, mientras en Europa liberalizan, privatizan e importan energías que contribuyen al calentamiento global”.
Tanto Eligio Hernández como Ramón Trujillo coincidieron en que el TTIP producirá un vaciamiento de nuestro sistema democrático, una “perversión”. “Las políticas de izquierdas y progresistas que antes se frenaban con una dictadura o un golpe de estado ahora serán frenadas por un acuerdo comercial”.