Las Palmas de Gran Canaria (Canarias - España), 19 de enero de 2016 / Las infecciones respiratorias en los bebés más vulnerables / Maria Elda Cabrera. ASSOPRESS
Con la bajada de las temperaturas aparecen cada año los virus respiratorios, que afectan especialmente a los más pequeños de la casa. El Virus Respiratorio Sincitial (VRS), más conocido como el “virus de los bebés”, es el principal causante de los casos de bronquiolitis en los niños menores de dos años, la causa más frecuente de ingreso hospitalario en la infancia. Esta enfermedad puede afectar durante meses o años a su salud respiratoria, teniendo en cuenta además que, durante los dos primeros años de vida, el sistema respiratorio de los lactantes sufre cambios extraordinarios en cuanto a su crecimiento y desarrollo funcionales.
Las infecciones respiratorias en los bebés más vulnerables. Los meses de diciembre, enero y febrero representan el pico de la estación epidémica, cuando bajan más las temperaturas, y cuando se registran más ingresos hospitalarios en UCI pediátrica por infecciones respiratorias agudas fácilmente prevenibles.
Según el Dr. Sanchez-Luna, jefe del Servicio de Neonatología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, las infecciones respiratorias constituyen la primera causa de morbimortalidad en los lactantes, siendo el virus respiratorio sincitial (VRS) la primera causa de infección respiratoria aguda grave en forma de bronquiolitis y el principal motivo de ingreso en la edad pediátrica.
El VRS es un patógeno de fácil contagio del que existen muestras durante todo el año, siendo entre octubre y marzo los meses con mayor índice epidémico y que está asociado a una alta morbilidad y hospitalización en niños menores de dos años.
La población más vulnerable son los prematuros, seguidos de los niños con cardiopatía congénita hemodinámicamente significativa. Pero también hemos visto como otras poblaciones pertenecen a este grupo de riesgo como son los pacientes con enfermedades que reducen la inmunidad y el síndrome de Down. El mayor riesgo es el de una mayor letalidad y el mayor reingreso hospitalario.
En España, la mayoría de los niños han desarrollado la enfermedad a los dos años. Entre el 0,5% y el 2% de los afectados son hospitalizados y de estos, de un 5 a un 10% necesitan cuidados intensivos. Aunque este porcentaje alcanza el 13% en los grupos de alto riesgo.De acuerdo a la Base de Datos Clínicos de Atención Primaria, 270.000 niños tienen cada año un episodio de Bronquiolitis Aguda por VRS. De ellos, 100.000 son menores de dos años, correspondiendo un 80% de los casos de estos casos a los menores de un año.
Tras la infección por VRS, la inmunidad no es completa y son frecuentes las re-infecciones. Además, cada vez más estudios asocian la bronquiolitis por VRS como un factor de riesgo de sibilancias recurrentes en niños. Aproximadamente entre el 40 y el 50% de los pacientes ingresados van a desarrollarlas en el siguiente año.
Diversos estudios han puesto de manifiesto que las infecciones de las vías respiratorias inferiores causadas por VRS suelen anticipar el posterior desarrollo del asma. Todo esto repercute en un descenso de la calidad de vida y un incremento notable del consumo de recursos asistenciales.
En lactantes y poblaciones de riesgo los síntomas son tos grave y persistente, dificultades para respirar, sibilancias y respiración rápida y agitada, cansancio y fatiga, aumento de la frecuencia respiratoria, pérdida del apetito, frecuencia cardíaca acelerada, tono bajo, adormecimiento y dificultad para conciliar el sueño, así como deshidratación o piel azulada (cianosis). La bronquiolitis puede durar entre 7 y 32 días, aunque la media suele ser de 15 días.
Desde Alianza Aire (organización que aglutina las necesidades e intereses de las familias españolas y de todos los grupos y poblaciones de riesgo vulnerables ante las infecciones respiratorias agudas), se trabaja para concienciar a la población acerca del riesgo que suponen las infecciones respiratorias agudas en los bebés más vulnerables a través de la defensa de sus derechos, poniendo de relieve que la prevención de estas infecciones respiratorias continúa siendo una prioridad para la salud pública.
Para ello difunden en su campaña #StopBronquiolitis, diversas medidas tan sencillas como lavarse las manos después de cambiar al bebé, evitar sitios cerrados con aglomeraciones, usar pañuelos desechables…