Participaron en la llegada de dos pateras a Canarias
Uno de los detenidos era el responsable de la contabilidad y recaudación de la cantidad que los inmigrantes debían abonar para acceder a las embarcaciones
Canarias (España), 18 de febrero de 2015/ Sucesos - Inmigración Ilegal / / Gabinete de Prensa.
Agentes de Policía Nacional han detenido a cinco personas como presuntos autores de un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal. Uno de los detenidos, que alcanzaba un puesto ejecutivo en la organización, era el responsable de contabilidad y recaudación de las cantidades que los inmigrantes debían abonar para acceder a las embarcaciones.
Los pasados días 30 de diciembre de 2014 y 13 de enero de 2015, arribaron dos pateras, una a las costas de Lanzarote y otra al Sur de Gran Canaria, provenientes de la costa del Sahara Occidental, y en las que embarcaban un total de 64 inmigrantes, 41 en la primera y 23 en la segunda, la totalidad de ellos de origen subsahariano y entre los que predominaban nacionales de Guinea Conakry, Senegal, Congo y Costa de Marfil. Entre ellos, se encontraban cuatro mujeres.
En el caso de la patera localizada el día 30 de diciembre de 2014, se recibió aviso en las dependencias de Salvamento Marítimo indicando la existencia de una embarcación tipo patera en algún punto entre la zona de Boujador (Marruecos) y las islas Canarias orientales.
Una vez activado el protocolo de actuación para estos casos, y tras ser avistada previamente por medios aéreos la patera, que se trataba de una embarcación neumática tipo zodiac de 8 metros de eslora, es interceptada y rescatada por la embarcación Salvamar Al Fair, dirigiéndose al puerto más cercano, el de Puerto Naos en Arrecife (Lanzarote), donde son asistidos por personal sanitario, corroborando que todos se encuentran en buen estado de salud, siendo trasladados a la Comisaría Local del Cuerpo Nacional de Policía de Arrecife (Lanzarote).
El Juzgado de Instrucción en Funciones de Guardia decretó su ingreso en el Centro de Internamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
Los funcionarios de Extranjería de la Jefatura Superior de Policía de Canarias comienzaron las labores de investigación con el fin de esclarecer todo lo acaecido en torno a esta patera, siendo significativo que era la primera embarcación de tipo neumática o zódiac que se interceptaba en las islas.
Este hecho alertó a los investigadores de la posibilidad de que las organizaciones mafiosas que operan en la costa de Marruecos, fundamentalmente en El Aaiún, buscaban nuevos medios de introducir en Canarias clandestinamente a los inmigrantes. Sin embargo, este tipo de embarcación neumática, mucho más rápida que una patera de madera y fibra tradicional, es a la vez más inestable e insegura y por tanto conlleva mayor peligro en alta mar, donde las condiciones meteorológicas en las fechas en las que se rescataron a los inmigrantes eran adversas.
Una vez realizadas las gestiones de investigación oportunas se procedió a la detención de dos de los ocupantes de la zodiac, de nacionalidad senegalesa, como responsables de la comisión de un delito de “Favorecimiento de la Inmigración Ilegal”, al tratarse de las personas encargadas de tripular y dirigir la embarcación, en connivencia con el grueso de la organización ubicada en el Sahara Occidental.
Asimismo, se detuvo a un tercer inmigrante, acusado además del delito de “Organización Criminal”, y que se encontraba “camuflado” junto al resto de inmigrantes en el Centro de Internamiento de Extranjeros. Éste detenido, integrante como los otros de la red de tráfico de inmigrantes, alcanzaba un puesto superior y directivo en la organización, en la medida que, de la información obtenida por los investigadores, se presupone que su función principal, además de participar en la preparación de la salida de las pateras y otras de tipo logístico en África, era la de contabilidad y recaudación de las cantidades que los inmigrantes debían abonar para alcanzar una plaza en cada embarcación. Los importes oscilaban entre los 300 y los 1.500€.
Del mismo modo, y no habiendo concluido con la investigación de de los hechos, el pasado día 13 de enero del presente, se produce la llegada a costas de la isla de Gran Canaria, de una nueva embarcación ocupada por 23 personas, procediéndose nuevamente por parte de Policías adscritos a la UCRIF de esta Jefatura Superior de Policía de Canarias, tras la realización de las gestiones de investigación pertinentes, a la detención como presuntos autores de un delito de “Favorecimiento de la Inmigración Ilegal”, de dos ciudadanos de origen senegalés, por su participación en la llegada de esta embarcación.
Tras tramitar esta Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Las Palmas los atestados correspondientes, todos los detenidos han sido puestos a disposición de los juzgados correspondientes, decretándose su ingreso en prisión, y enfrentándose los mismos a penas superiores a los cuatro años de prisión.
Debe tenerse en cuenta, a este respecto, el reproche penal que estas conductas presentan, en la medida que el riesgo vital que soportan los inmigrantes para acceder a España es muy alto por las circunstancias del viaje, a lo que se suma las pésimas condiciones y el desprecio hacia la dignidad personal de la red delictiva que organiza estas expediciones, que usualmente no ofrece a los inmigrantes ni chalecos salvavidas, ni alimentos ni bebida suficiente para afrontar dicha travesía.
Uno de los detenidos era el responsable de la contabilidad y recaudación de la cantidad que los inmigrantes debían abonar para acceder a las embarcaciones
Canarias (España), 18 de febrero de 2015/ Sucesos - Inmigración Ilegal / / Gabinete de Prensa.
Agentes de Policía Nacional han detenido a cinco personas como presuntos autores de un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal. Uno de los detenidos, que alcanzaba un puesto ejecutivo en la organización, era el responsable de contabilidad y recaudación de las cantidades que los inmigrantes debían abonar para acceder a las embarcaciones.
Los pasados días 30 de diciembre de 2014 y 13 de enero de 2015, arribaron dos pateras, una a las costas de Lanzarote y otra al Sur de Gran Canaria, provenientes de la costa del Sahara Occidental, y en las que embarcaban un total de 64 inmigrantes, 41 en la primera y 23 en la segunda, la totalidad de ellos de origen subsahariano y entre los que predominaban nacionales de Guinea Conakry, Senegal, Congo y Costa de Marfil. Entre ellos, se encontraban cuatro mujeres.
En el caso de la patera localizada el día 30 de diciembre de 2014, se recibió aviso en las dependencias de Salvamento Marítimo indicando la existencia de una embarcación tipo patera en algún punto entre la zona de Boujador (Marruecos) y las islas Canarias orientales.
Una vez activado el protocolo de actuación para estos casos, y tras ser avistada previamente por medios aéreos la patera, que se trataba de una embarcación neumática tipo zodiac de 8 metros de eslora, es interceptada y rescatada por la embarcación Salvamar Al Fair, dirigiéndose al puerto más cercano, el de Puerto Naos en Arrecife (Lanzarote), donde son asistidos por personal sanitario, corroborando que todos se encuentran en buen estado de salud, siendo trasladados a la Comisaría Local del Cuerpo Nacional de Policía de Arrecife (Lanzarote).
El Juzgado de Instrucción en Funciones de Guardia decretó su ingreso en el Centro de Internamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
Los funcionarios de Extranjería de la Jefatura Superior de Policía de Canarias comienzaron las labores de investigación con el fin de esclarecer todo lo acaecido en torno a esta patera, siendo significativo que era la primera embarcación de tipo neumática o zódiac que se interceptaba en las islas.
Este hecho alertó a los investigadores de la posibilidad de que las organizaciones mafiosas que operan en la costa de Marruecos, fundamentalmente en El Aaiún, buscaban nuevos medios de introducir en Canarias clandestinamente a los inmigrantes. Sin embargo, este tipo de embarcación neumática, mucho más rápida que una patera de madera y fibra tradicional, es a la vez más inestable e insegura y por tanto conlleva mayor peligro en alta mar, donde las condiciones meteorológicas en las fechas en las que se rescataron a los inmigrantes eran adversas.
Una vez realizadas las gestiones de investigación oportunas se procedió a la detención de dos de los ocupantes de la zodiac, de nacionalidad senegalesa, como responsables de la comisión de un delito de “Favorecimiento de la Inmigración Ilegal”, al tratarse de las personas encargadas de tripular y dirigir la embarcación, en connivencia con el grueso de la organización ubicada en el Sahara Occidental.
Asimismo, se detuvo a un tercer inmigrante, acusado además del delito de “Organización Criminal”, y que se encontraba “camuflado” junto al resto de inmigrantes en el Centro de Internamiento de Extranjeros. Éste detenido, integrante como los otros de la red de tráfico de inmigrantes, alcanzaba un puesto superior y directivo en la organización, en la medida que, de la información obtenida por los investigadores, se presupone que su función principal, además de participar en la preparación de la salida de las pateras y otras de tipo logístico en África, era la de contabilidad y recaudación de las cantidades que los inmigrantes debían abonar para alcanzar una plaza en cada embarcación. Los importes oscilaban entre los 300 y los 1.500€.
Del mismo modo, y no habiendo concluido con la investigación de de los hechos, el pasado día 13 de enero del presente, se produce la llegada a costas de la isla de Gran Canaria, de una nueva embarcación ocupada por 23 personas, procediéndose nuevamente por parte de Policías adscritos a la UCRIF de esta Jefatura Superior de Policía de Canarias, tras la realización de las gestiones de investigación pertinentes, a la detención como presuntos autores de un delito de “Favorecimiento de la Inmigración Ilegal”, de dos ciudadanos de origen senegalés, por su participación en la llegada de esta embarcación.
Tras tramitar esta Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Las Palmas los atestados correspondientes, todos los detenidos han sido puestos a disposición de los juzgados correspondientes, decretándose su ingreso en prisión, y enfrentándose los mismos a penas superiores a los cuatro años de prisión.
Debe tenerse en cuenta, a este respecto, el reproche penal que estas conductas presentan, en la medida que el riesgo vital que soportan los inmigrantes para acceder a España es muy alto por las circunstancias del viaje, a lo que se suma las pésimas condiciones y el desprecio hacia la dignidad personal de la red delictiva que organiza estas expediciones, que usualmente no ofrece a los inmigrantes ni chalecos salvavidas, ni alimentos ni bebida suficiente para afrontar dicha travesía.
