La ‘norma ASEPROCE’ (Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero) garantiza la excelencia del servicio a alumnos, padres y profesionales
Þ “Es importante tener un sistema de control para lograr la excelencia y evitar disgustos, sobre todo cuando hablamos de la educación de los menores”, dice Ignacio Más, portavoz de ASEPROCE
Þ “Llevamos a menores a estudiar fuera. Los usuarios han de pedir siempre garantías y no fiarse si no existen”, dice Ignacio Más
Madrid (España), 6 de julio de 2014 / Educación - ASEPROCE / Gabinete de Prensa.
Los representantes de ASEPROCE, integrado por las empresas más importantes de cursos en el extranjero, advierten a padres, educadores y profesores que se aseguren siempre de que la empresa que gestiona el curso de sus hijos cuenta con un sello de calidad auditado. “No hacerlo es un riesgo e incluso una irresponsabilidad” considerando que la mayoría de estos cursos van destinados a menores de edad. Hace más de medio año, ASEPROCE (Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero), dio a conocer la existencia de este sello o norma auditada para que todas las empresas del sector pudieran implantarlo.
La iniciativa de contar con un sello de calidad auditado o norma legal fue impulsada por casi medio centenar de empresas integradas en esta organización, siete de ellas catalanas. Lo hicieron para evitar se que produjeran problemas de calidad en los servicios de formación que presta este importante colectivo empresarial, dada la enorme sensibilidad e importancia de su cometido: la formación de estudiantes en el extranjero, en su mayoría menores de edad. El objetivo de la norma es la excelencia en el servicio, dentro de un sector empresarial, hasta hora no regulado.
Los empresarios de ASEPROCE pusieron en común su conocimiento, y su experiencia de más de veinte años de actividad, para garantizar el control de la calidad en el servicio con un sello certificado. Este sello está auditado externamente por la prestigiosa consultora LRQ Business Assurance (Lloyd’s Register Quality Assurance). La asociación anima a todas las empresas dedicadas a esta actividad a informase gratuitamente en ASEPROCE para conocer el sello que determina los criterios de funcionamiento óptimos.
Ignacio Más, uno de los portavoces de ASEPROCE, ha dicho que “este sello garantiza siempre a padres, alumnos, familias, profesionales y educadores la máxima calidad de los programas educativos en el extranjero”. Es importante que los usuarios de cursos en el extranjero conozcan la importancia y su utilidad, lo pidan, no se conformen ni se fíen de cualquier entidad que ofrezca cursos, sino de aquellos profesionales que cuentan con garantías.
Cualquiera que vaya a realizar un programa de formación en otro país, de cualquier modalidad -curso intensivo de idiomas, postgrado, año escolar, intercambio o similar- “debe asegurarse que lo gestiona una empresa que ofrezca la máxima garantía de calidad”, ha insistido Ignacio Más.
El número de personas que ha salido a estudiar fuera de España para aprender otro idioma, realizar un curso o prácticas compaginadas con estudios, ha crecido en los últimos años. Se prevé que en 2014 el número de estudiantes que viajen fuera de España aumente. Por comunidades autónomas, viajan al extranjero más los procedentes de Madrid, Cataluña y Andalucía, que los de otras comunidades.