No cabe duda la reflexión siempre ha sido un proceso cognitivo humano altamente necesario por no decir imprescindible. Podemos observar, ordenar…pero si no sabemos reflexionar nunca llegaremos a realizar análisis aplicables a la solución de problemas prácticos.
Y es por ello, por su capacidad resolutiva, que la reflexión se nos plantea ante cualquier cuestión a solventar ya sea social o económica, que ya sabemos esta última trata de la administración de recursos escasos para una población creciente.
Por otro lado, y ateniéndonos a la Ley de Sistemas (tanto abiertos como cerrados), los países formarían un sistema global todos unidos. O dicho de otro modo más desenfadado; todos tenemos algo que aprender de los demás. Los países, pues, como las personas, tenemos que aprender unos de los otros; los más jóvenes de los mayores y los mayores de los más jóvenes.
Siguiendo esta analogía, a nivel Innovación, países como EEUU (al igual que Japón y Alemania) serían países adultos, y España por el contrario sería un país joven (EEUU, Alemania y Japón son los países del mundo donde más se patenta y registra la Propiedad Intelectual al año).
A nivel Burocracia, España, y en ella Canarias, sería una región a lo mejor demasiado burocratizada y otros países como EEUU serían a lo mejor un “anti-un- mínimo” de burocratización.
En el caso de Canarias y España, que nos concierne más directamente al menos desde el punto de vista económico no cabe duda el exceso de BUROCRATIZACIÓN está constituyendo la GRAN TRABA para la INNOVACIÓN. Esto está ocasionando una barrera para el desarrollo de una economía competitiva y por tanto un despilfarro y mala administración de los recursos que puedan haber.
Pero como bien sabemos los canarios y españoles con nuestro refranero popular, que viene a ser algo así como el bolso de Mary Poppins, porque de él se sacan remedios para todo:
“Dios no da problema que no tenga solución”
…y entonces nos preguntamos: “¡¿Y dónde está esa salvación que no la he visto?!”
En el Reino Unido, que más o menos tienen el mismo problema, han encontrado una solución. Se llama Nick Clegg (lider del CDL en Gran Bretaña) que está removiendo los cimientos del sistema para analizar paso por paso qué constituye una ventaja y qué constituye mayormente un inconveniente.
Si estuviésemos contemplando la famosa película de Walt-Disney no cabría duda que este señor también habría salido del bolso de Mary Poppins, pues la tarea esta emprendiendo este gigante de la reconstrucción de una economía enquistada por la burocracia resulta en un trabajo sumamente analítico y riguroso y resulta obvio lo realiza bajo un alto nivel de autoexigencia.
Pero el Sr. Nick Clegg, como todo talentoso que se precie, sabe todo está relacionado. Y cuando digo todo me refiero a los Derechos Humanos, la Igualdad, La Libertad, El Respeto, la Diversidad, La Moral, La Economía etc. De ahí que su política se haya convertido en un foro abierto de cooperación con y para el ciudadano.
Vuelve la Polis de Atenas.
Le doy gracias a mi refranero español, en especial hoy por su refrán “Dios no da problema a quién no da solución”.
Le doy gracias a mi abuelo, en paz descanse, por haberme llevado cuando era una cría a ver “Mary Poppins”.
Y le doy gracias al libro “El Alquimista” por haberme devuelto la fe en los milagros.
Y como economista, como escritora y como ciudadana canaria, europea y española sólo les digo una cosa:
NO DESAPROVECHEMOS ESTA OPORTUNIDAD.
La Innovación nos está tocando a la puerta.
Y si es de la mano del Sr. Nick Clegg…sigámosle.
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