El presidente de la organización nacionalista señala que es una manera de rebelarse contra las medidas del PP contra la crisis que afectan a los trabajadores y clases medias
Santa Lucía, 17 de febrero de 2012 / Manifiesto - Sindical / Gabinete de Prensa.
Nueva Canarias (NC), hace un llamamiento a la ciudadanía para que acudan a la manifestación contra la reforma laboral que han convocado para el próximo domingo los sindicatos en todo el Estado (En Las Palmas de Gran Canaria: a las 12h. Desde San Telmo hasta la Plaza de la Feria).
“Participar en esta manifestación es una manera de rebelarse y protestar contra esta manera de afrontar la crisis, impuesta por Europa y los mercados”, que carga el peso de las medidas sobre los trabajadores y clases medias, apuntó Román Rodríguez, presidente de Nueva Canarias.
Sin dejar de reconocer que la reforma laboral tiene algún elemento positivo, la formación nacionalista asegura que la valoración general es la nueva norma sólo servirá, en el momento actual de recesión, para generar más desempleo, tal y como ha reconocido el propio Partido Popular.
Nueva Canarias asegura que el PP ha engañado a los ciudadanos con esta reforma puesto que, a pesar de haber prometido durante toda la campaña electoral que se centrarían en la facilidad de contratación y en eliminar la temporalidad, el resultado es que abarata y facilita el despido.
“Las condiciones para poder despedir están ligadas a la pérdida de facturación de las empresas”, apunta Román Rodríguez que añade que, en una etapa de recesión como la actual, “la inmensa mayoría de las empresas perderán facturación y por tanto despedirán más”. En consecuencia la precariedad laboral, la temporalidad y el paro, van a crecer mucho este año, de manera que, con total seguridad se alcanzarán los 6 millones de desempleados en el Estado y en Canarias nos aproximaremos a los 400.000 parados.
Contra los trabajadores
Los empresarios se ven favorecidos con esta reforma con total claridad, asegura Rodríguez basándose en el hecho que las relaciones entre empresarios y trabajadores quedan al libre albedrío de los empresarios, porque se eliminan los procesos de negociación que equilibraban la relación entre ambas partes.
Rodríguez también destaca como un aspecto muy negativo de esta ley que los empresarios puedan bajar los salarios de forma unilateral y cambiar las condiciones de trabajo, por razones de productividad o facturación, flexibilizando los asuntos internos de las empresas (horarios, salarios, días de libranza, vacaciones, etc.) en contra de los trabajadores. La posibilidad de realizar Expedientes de Regulación de Empleo sin que tengan que ser aprobados por la Administración es un elemento muy negativo que además afectará por igual al personal laboral de las administraciones públicas y al personal de las empresas públicas de estas administraciones. Unos instrumentos muy potentes en manos de los empresarios que dejan a su buena voluntad no hacer uso indebido de estas herramientas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario