A Coruña, 13 de marzo de 2012 / Cartas al Director /Suso do Madrid
Mariano Rajoy presentó el pasado lunes el mecanismo para enjugar las deudas pendientes de las administraciones públicas con los proveedores. Pienso que no es una iniciativa más y el Gobierno lo sabe y lo valora. El presidente ha querido dar al acto la trascendencia obligada de un instrumento que debe ser clave para sanear comunidades y ayuntamientos y devolver la confianza al tejido empresarial a muy corto plazo. Hablan de 35.000 millones de euros de estímulo a la actividad. Un motor nuevo para que la economía arranque de una vez. Me parece que se trata de la decostrucción, utilizando un lenguaje progresista, de lo que supusieron los “Planes E”. Esta política no consiste tanto en aumentar el gasto sino en pagar las deudas para que las empresas puedan seguir trabajando. Ciertamente algo está cambiando.
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