El titular de Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente informó hoy en el Parlamento sobre el Dictamen emitido por el Consejo Económico y Social
• El consejero destaca la necesidad de simplificar y armonizar el amplio corpus legal en la materia
Canarias, 16 de marzo de 2011 | Medio Ambiente | Gabinete de Prensa.
El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, informó hoy en Comisión parlamentaria a instancias del grupo socialista sobre el dictamen emitido por el Consejo Económico y Social de canarias sobre el Anteproyecto de Ley de Armonización en materia de Protección del Territorio y del Medio Ambiente.
A pesar de considerar extemporáneo el objeto de la comparecencia, al no estar el Anteproyecto de Ley referido siquiera sometido a aprobación por el gobierno, y en consecuencia no se ha convertido aún en Proyecto de Ley, no estando por tanto aún en el mundo jurídico y ni siquiera político, el consejero aportó un análisis pormenorizado de los aspectos más relevantes de dicho dictamen, haciendo hincapié en el hecho de que antes de que el texto pueda ser debatido en foros políticos, deberá incorporar algunas de las recomendaciones efectuadas por este órgano consultivo. La complejidad y amplitud de la materia abarcada, y el consiguiente debate que ello requerirá, han hecho que el Gobierno haya decidido posponer su tramitación hasta la siguiente legislatura, dada la cercanía de los comicios.
El titular del área de Medio Ambiente destacó del dictamen lo expresado en el capítulo de Conclusiones y Recomendaciones, ya que reafirma claramente la oportunidad, conveniencia y contenido del Anteproyecto. El Consejo Económico y Social “hace una valoración positiva, de los objetivos que se pretenden con la iniciativa legislativa de referencia, en la medida en que ve necesario proceder a estos cambios en el actual marco regulatorio, y a la configuración de nuevas normas en materia de ordenación del territorio y medio ambiente, de cara a corregir determinadas ineficiencias que hoy se muestran.”
Domingo Berriel aclaró también algunos puntos en los que mostraba disconformidad con la valoración del dictamen, garantizando la validez, necesidad y oportunidad jurídicas de la medida propuesta, matizando también un reparo injustificado del CES, en el que se establecía la necesidad de contar con los cabildos y ayuntamientos, ya que este proceso sí se realizó antes de remitir el texto al órgano consultivo, y alabó la conveniencia de otras observaciones, como la necesidad de establecer una gradación en las sanciones por infracciones medioambientales y urbanísticas.
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