“Ni Coalición Canaria cree en el sistema electoral paleodemocrático impuesto a Canarias para que el Parlamento no refleje la pluralidad existente en el pueblo”
“El sistema electoral ultracaciquil y ultraperiférico impuesto al pueblo canario permitiría que, por ejemplo, un 20% de los canarios pudiera decidir privatizar la sanidad”
“Es obvio que hay que escolarizar en cultura democrática a quienes integran el Parlamento de Canarias”
Ramón Trujillo, coordinador de Izquierda Unida Canaria (IUC), afirma que “en los congresos autonómicos de Coalición Canaria, por una parte, las asambleas de Coalición Canaria de Tenerife no debieran sumar más del 25% de los votos y, por otra, las de las islas no capitalinas debieran disponer del 50% de los votos. Mientras no se haga así, se evidencia que ni Coalición Canaria cree en el sistema electoral paleodemocrático que imponen al pueblo canario con la finalidad de que el Parlamento no refleje la pluralidad existente en el pueblo canario”.
Trujillo considera que “el sistema electoral ultracaciquil y ultraperiférico impuesto al pueblo canario por el oligopolio tripartito permitiría que, por ejemplo, si un 20% de los canarios votara a quienes quisieran privatizar la sanidad y otro 80% a quienes están en contra, sería posible que el 20% impusiera su voluntad al 80% si estuviera situado geográficamente de la manera más óptima. Es obvio que hay que escolarizar en cultura democrática a quienes integran el Parlamento de Canarias”.
El coordinador de IUC denuncia que “ni CC, ni PP, ni PSOE, ni el presidente del Gobierno de Canarias han respondido a las cartas que les remitió Izquierda Unida Canaria pidiendo la bajada de los topes electorales al 3%, como en otras comunidades autónomas”.
Asimismo, “tampoco nos respondió el vicepresidente del Gobierno de Canarias a otra carta similar que le remitió IUC el pasado otoño, ni Rubalcaba a la carta que, el pasado día 22 de mayo, le envió Cayo Lara pidiéndole su compromiso con la democratización de Canarias”.
Trujillo considera que “PP, PSOE y CC van a seguir imponiendo a Canarias un sistema paleodemocrático que seguirá garantizando que, en torno al 17% del Parlamento de Canarias no sea elegido por el pueblo, sino usurpado por un sistema electoral que ha convertido en ley una usurpación parcial de la soberanía popular que debiera ser delito. Es como si cada seis legislaturas todo el Parlamento fuera ocupado por diputados no elegidos por nadie”.
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