jueves, 2 de agosto de 2012

ATAMARAZAYT RECHAZA LA NUEVA MAMANDURRIA DEL PLAN PARCIAL TAMARACEITE SUR


Los ecologistas sostienen que este Plan arrasará por una zona de alto valor agrícola para beneficio de poceros y empresas constructoras. Afirman que el modelo del grupo de gobierno del PP para Tamaraceite es más cemento y ningún espacio para el ocio y esparcimiento de los/as vecinos/as.

Las Palmas de GC, 2 de agosto de 2012 / Medio Ambiente  - Sindical / Gabinete de Prensa.

El Colectivo Ecologista Atamarazayr ha rechazado hoy en un comunicado de prensa “la inminente destrucción de una zona de alto valor agrícola, regalada por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria a la misma empresa constructora que arrasó por la finca de La Mareta en Telde”.

Los ecologistas han afirmado “que la burbuja inmobiliaria diseñada por el expresidente de la derecha cavernaria y miembro del criticado trío siniestro de Las Azores, José María Aznar, parece no haberles todavía estallado en la cara de los culpables de esta crisis capitalista, sino que aún siguen promoviendo macroproyectos altamente especulativos como ha sucedido en el pasado reciente de Tamaraceite, en lugares emblemáticos de la ecología canaria como la Montaña de San Gregorio o las Charcas de San Lorenzo”.

Esta organización ambientalista considera “que este distrito capitalino no necesita de proyectos urbanísticos promovidos por presuntos especuladores, que aparte de destruir espacios que son parte de la identidad de los/as vecinos/as del secuestrado municipio de San Lorenzo, acabarán con todo el pequeño y mediano comercio de la zona, para que grandes emporios multinacionales como Decatlon, Leroy Merlín o Alcampo se sigan haciendo de oro a costa de la dignidad y el futuro de nuestro pueblo”.

Atamarazayt señala “que el beneficio de este supuesto pelotazo no será para la población de Tamaraceite que seguirá en la miseria, en el desempleo y en una situación insostenible a nivel social, sino que toda la ganancia se la llevarán los de siempre: los poderosos, los constructores y una casta política que solo se mueve por intereses personales y no para la colectividad de la mayoría de los/as habitantes.

Los ecologistas han señalado “que este proyecto urbanístico supondrá un nuevo expolio a un patrimonio de nuestro pueblo, tirando este Ayuntamiento por el camino más fácil del lucro y el negocio, en vez de potenciar en esos terrenos desolados y abandonados la agricultura, así como la creación de espacios de ocio y tiempo libre para una población azotada por la pobreza.

Atamarazayt afirmó por último “que no nos vendan que este proyecto va a dar trabajo a nuestro pueblo, porque las empresas que vendrán serán multinacionales con una política de personal muy estricta, caracterizada por marginar en el empleo a las poblaciones donde se asientan. Está de sobra demostrado que el cemento no se puede comer, que la agricultura puede salvar a miles de familias de esta hambre inminente, que ya está sembrando por todo el estado con su política neoliberal el gobierno del Partido Popular”.

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