· La consejera resalta que han sido los propios trabajadores los que “han realizado un esfuerzo al reducirse su salario para cubrir el déficit de la empresa, evitando así un ERE que hubiera enviado al desempleo a la mitad de sus compañeros”
Las Palmas de GC (Canarias), 11 de febrero de 2014 / Empleo / Gabinete de Prensa.
La consejera de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Francisca Luengo, lamenta que “finalmente, el Cabildo de Gran Canaria nada haya tenido que ver en el acuerdo que hemos alcanzado con los trabajadores del Instituto tecnológico de Canarias (ITC) para evitar el ERE”.
Luengo asegura que “la prueba de que el Cabildo no ha participado en el acuerdo es que en él no se recoge ni un solo céntimo de euro que haya aportado la corporación insular. Al contrario, han sido los propios trabajadores los que, con una considerable reducción salarial, han conseguido corregir el déficit”.
La consejera asegura que “el PP pretende reírse de los trabajadores, a los que no ha ayudado en nada, mintiendo al decir que el dinero que ha ofrecido el Cabildo ha salvado al ITC. Muy al contrario, la moción del Cabildo hubiera impedido el acuerdo con los trabajadores para salvar el ITC, porque no restablecía el déficit ni impedía el ERE”.
Luengo recordó hoy en el Parlamento de Canarias que “el presidente del Cabildo me prometió un millón de euros hace meses, luego lo quitó porque según dijo públicamente en un pleno, eso era resolver el problema al Gobierno de Canarias y a él no le iban a endosar el problema del ITC. Lo que hizo luego fue guardar medio millón y lo sacó ahora, cuando ya está solucionado todo. O sea, ¿Cuál ha sido el papel del cabildo de Gran Canaria en esta película: ninguno”.
“Otra cosa –añade- es qué servicio tiene que prestar a cambio el ITC y que no ha dicho, porque esos 500.000 euros no se los regala, exige contraprestaciones. Desde luego, en el Gobierno estudiaremos la propuesta”.
La consejera ha explicado en el Parlamento el camino recorrido para alcanzar un acuerdo y ha explicado que “la empresa hizo una oferta consistente en reducción del 10% y complementos, entre otras medidas, pero los trabajadores lo querían vincular a dos años, de forma que en el 2016 recuperarían lo perdido. Dicho de otra manera, en 2016 se produciría un incremento de la masa salarial que impide la ley de estabilidad presupuestaria”.
“Aquí surgió un escollo que finalmente hemos podido salvar: los trabajadores pretendían que solo fuera una reducción a dos años comprometiendo al próximo Gobierno a aumentar el déficit. Como comprenderán, no solo era inviable, es que era ilegal”. La negativa de los trabajadores a cerrar un acuerdo, retrasando la solución, y las graves tensiones de tesorería nos dejó un solo camino, por ello se preparó un ERE. Finalmente ha habido acuerdo”.
Luengo ha querido agradecer a los trabajadores el esfuerzo realizado “y quiero que sepan el enorme valor que tiene el sacrificio que han hecho al reducirse su salario para cubrir el déficit de la empresa, evitando así un ERE que hubiera enviado al desempleo a la mitad de sus compañeros”.
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