• A pesar de la importante recuperación, no se descarta que puedan surgir nuevas recaídas en los próximos meses
• La debilidad de la demanda y los problemas de financiación son los principales factores que limitan la actividad empresarial
Las Palmas de Gran Canaria 21 de julio de 2010 | Empresas | Gabinete de Prensa La Cámara - ASSOPRESS.
Durante el segundo trimestre de 2010, la confianza empresarial experimentó un nuevo repunte, a pesar de la previsión de estabilización que denotaban los datos del último Indicador de Confianza Empresarial (ICE), dados a conocer en abril. El incremento fue superior a los siete puntos, con lo que la foto fija de julio muestra un valor de -10,1 puntos. Con esta mejoría, ya son seis trimestres consecutivos en los que la negatividad va remitiendo. La confianza empresarial canaria alcanza el valor más elevado de los últimos diez trimestres y, aunque se mantiene en terreno negativo, se sitúa 14 puntos por encima del nivel alcanzado hace justo un año, en julio de 2009.
La directora general de la Cámara de Comercio de Las Palmas, Pilar Alcaide, se mostró cauta a pesar del repunte, recordando que “las empresas siguen en un momento de gran dificultad” y aludió al clima de “desconfianza y al cierto descontrol normativo” para explicar que “la cifra de negocio continúa deteriorada”.
Por su parte, el comportamiento de la confianza manifestado por la media de los empresarios españoles mantuvo la misma tendencia que en las Islas, aunque no con tanta intensidad, pasando de -18,2 puntos en abril a -14,8 en julio.
Estos son los datos que arroja la evolución del nivel de confianza empresarial en Canarias, elaborados con los datos de las 1.112 encuestas realizadas a empresas del Archipiélago, y dados a conocer este miércoles por, además de Alcaide, el director general de la Cámara de Santa Cruz de Tenerife, Vicente Dorta, y las directoras de los Servicios de Estudios Económicos de ambas Cámaras, Patricia Santana –Las Palmas- y Lola Pérez –Santa Cruz de Tenerife.
De las dos variables que componen el ICE, el índice que marca la situación actual se recupera de forma significativa, aunque se mantiene en negativo. De señalar -24,6 puntos en la encuesta de abril, ha pasado a situarse ahora en los -13,6 puntos. Por su parte, la otra variable, que mide las expectativas para el siguiente trimestre, arroja un saldo negativo de -6,6 puntos, lo que supone un avance de casi cuatro puntos con respecto a abril (-10,5 puntos). Pese a que la actividad todavía será negativa en los próximos meses, los empresarios esperan que el nivel de deterioro vaya siendo cada vez de menor intensidad.
La mejora que experimenta la confianza de las empresas de las Islas se ha sustentado básicamente en “la aportación menos negativa de la variable de inversión que recupera algo más de cinco puntos respecto al trimestre anterior”, señaló Patricia Santana. Alrededor del 70% de la mejoría de la confianza en este trimestre se nutre de esta aportación. También avanza sensiblemente la variable de empleo, en algo más de dos puntos, mientras que la cifra de negocio apenas registra variación respecto al trimestre anterior.
La confianza por sectores
Todos los sectores de actividad registran indicadores de confianza negativos, aunque por primera vez desde el inicio de la crisis aparece la variable de inversión en zona positiva en los sectores de Hostelería y Comercio. Con respecto al trimestre anterior, mejora la confianza en la Industria, el subsector Otros Servicios y el Comercio, que mantiene el mejor nivel de confianza, mientras que cae ligeramente en Hostelería y algo más significativamente en Construcción.
Con respecto al comportamiento interanual, todos los sectores registran avances significativos de dos dígitos, a excepción de la Industria, que apenas ha avanzado tres puntos en los últimos doce meses.
El ICE de Industria se recupera significativamente, elevándose más de 6 seis puntos desde el trimestre anterior, apoyado por mejoras en todas las variables, especialmente en la cifra de negocio y la inversión. Se mantiene el comportamiento zigzagueante de este sector, que se sitúa como el segundo en deterioro de la confianza (-15,9 puntos). Patricia Santana recordó que Industria “solo ha recuperado 3,4 puntos en un año, lo que demuestra que es uno de los más afectados por la crisis”.
En este segundo trimestre se aprecia nuevamente un cambio de comportamiento en Construcción, que vuelve a caer casi seis puntos, hasta situarse en -28,2. Este retroceso “mantiene al sector con el nivel de confianza más bajo, a gran distancia de los demás sectores”, recordó Santana.
El ICE de Comercio lleva ya varios trimestres moviéndose en cifras más favorables, recuperando más de tres puntos desde el trimestre anterior para quedar en -7,7 puntos. Empeora levemente la cifra de negocio, es decir, “las ventas prácticamente no se mueven”, señala la directora de Estudios Económicos de Cámara Las Palmas, el empleo mejora y la inversión registra un valor positivo por primera vez desde octubre de 2007.
La confianza entre los empresarios de Hostelería y Turismo retrocede débilmente por segundo trimestre consecutivo (siete décimas), hasta situarse en -8,1, inducida por un empeoramiento significativo en la cifra de negocios, mientras que el empleo avanza tímidamente y la inversión retorna a zona positiva por primera vez en dos años. A pesar de este resultado, la Hostelería sigue colocada como el segundo sector con mejor índice de confianza tras el Comercio. La explicación de este retroceso hay que buscarla “en el tradicional mal comportamiento del sector durante el segundo trimestre del año”, recalcó Santana.
El denominado Resto de Servicios (transportes, consultorías, ocio…) registró el comportamiento más favorable del conjunto de sectores de actividad durante este trimestre, remontando diez puntos hasta situarse con un ICE de -9,7 puntos. La causa principal es la sensible mejoría sustancial en la variable de inversión. El empleo avanza casi tres puntos, mientras que la cifra de negocio registró una tímida mejoría de apenas medio punto.
Factores que limitan la actividad empresarial
De hecho, la debilidad de la demanda, reflejada en el estancamiento de la cifra de negocio, continuó siendo el principal problema al que se enfrentaron las empresas del Archipiélago en el segundo trimestre del año. Eso, a pesar de que se reduce cuatro puntos el porcentaje de empresas que apuntan a este factor, pasando del 70% a casi el 66% en este trimestre.
A la vista de estos datos, Vicente Dorta señaló la necesidad “de hacer competitiva la economía canaria”. Labor que debe sustentarse, según el director general de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, “en tareas que deben acometer el sector público, generando el clima necesario para que ser empresario en las Islas no sea una continua superación de obstáculos; las propias empresas, aumentando su productividad, y los trabajadores, mediante la formación continua y asumiendo que la competitividad debe estar a la altura” de los mejores países en este aspecto.
Lola Pérez incidió en que la debilidad de la demanda está afectando de forma muy notable a la Construcción, sector que además soporta “problemas de financiación, no ya para proyectos futuros, sino para la propia liquidez”.
Como segundo factor más negativo, se sitúan las dificultades de financiación, que continúan estrangulando la capacidad de inversión y de liquidez de las empresas. Aun así, se reduce en este trimestre el número de empresas que señalan a este factor, pasando de un 42,2% de abril al 32,9% actual. También se produce un descenso, más significativo, del porcentaje de empresas que señalan el aumento de la competencia como factor que dificulta la marcha de sus negocios, pasando de un 26% de la encuesta de abril a un 20,4%. De igual forma, pierden importancia con respecto al trimestre anterior los trámites administrativos (11,8%) y otras causas (13,7%).
Pilar Alcaide abundó en los notables “problemas de financiación, que suponen un nudo que perjudica la actividad empresarial. La directora de Cámara Las Palmas indicó que “la situación no se puede prolongar, porque las empresas ya han hecho lo que tenían que hacer”, pero la financiación continúa sin llegar.
Al respecto, Dorta recordó que “para el 82% de las empresas han aumentado las garantías y avales que se exigen para la concesión de créditos y el 62% señalan que los tipos de interés se han encarecido”.
Finalmente, la escasez de personal cualificado y la insuficiencia de capacidad, con un 5,5% y un 1,5% de las respuestas, respectivamente, van perdiendo peso de manera progresiva, debido a la actual coyuntura.
PIE DE FOTO: (De izquierda a derecha) Lola Pérez, Vicente Dorta, Pilar Alcaide y Patricia Santana.
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