jueves, 16 de junio de 2011

Brevescien. Entretenimiento inocente de docentes reúne más de 260 microrrelatos de nueve profesores

Esther Terrón Montero es la coordinadora de este libro 


La obra se presenta el próximo martes 21 en el Ateneo de La Laguna, en Tenerife

La Launa (Tenerife), 16 de junio de 2011 | Cultura - Libros | Gabinete de Prensa.

Ediciones Idea lanza -en su colección Cajón de Sastre- Brevescien. Entretenimiento inocente de docentes, un libro que agrupa más de doscientos sesenta microrrelatos -todos ellos exactamente de cien palabras- escritos por nueve docentes que se estrenan en el mundo de la literatura: Lola Antúnez y Celia Martín, Nena Arias Expósito, Concha Bracero, Laly Hernández, Magnolia Medina, Tibisay Mesa, Ignacio R.Alemparte, José Ignacio R. Araújo y Esther Terrón Montero, que además es la coordinadora y prologuista de la obra. El
volumen se presenta el próximo martes, 21 de junio, en el Ateneo de La Laguna en Tenerife. En el acto intervendrán todos los autores y un representante de la editorial canaria.

No hace tanto, en los centros escolares e institutos se discutía de política, de literatura, de cine, de música; había intercambio de revistas y de libros. Había tiempo y ánimo para ello y se consideraba natural que personas universitarias, preparadas y cultas, confrontaran sus opiniones. Hoy podemos decir que esa
situación ha dejado de darse. Sin entrar en las causas de este empobrecimiento cultural, afortunadamente existen todavía enseñantes que desarrollan una actividad intelectual propia y en cierto modo, inherente a la práctica docente.

Brevescien, entretenimiento inocente de docentes es el resultado del modesto proyecto compartido por un grupo de profesores: presentar cada lunes un brevísimo cuento de, exactamente, cien palabras. Durante dos años, cada semana, una representación de los autores se reunía a la hora del recreo en el Departamento de Filosofía del I.E.S Las Veredillas de Santa Cruz de Tenerife para leer sus relatos. Cada lunes elegían una
palabra al azar en el diccionario y adoptaban el compromiso de buscar noventa y nueve palabras más que dieran sentido a esa primera. Así se ha construido este libro: las palabras que encabezan los cuentos, ordenadas alfabéticamente, son aquellas que los lunes extraían de un pequeño diccionario.

Los autores


Lola Antúnez y Celia Martín. El primer proyecto literario de Celia Martín de León consistió en describir, en riguroso orden, todos y cada uno de los objetos que en aquel momento se encontraban en la casa, y recuerda con emoción aquel dibujo legendario de Lola Antúnez Cabrera que hizo reír hasta llorar a toda una congregación de monjas.

Nena Arias Expósito. Nació en 1964. Luego creció, se licenció en Filología Hispánica, se casó y tiene tres hijos. Como escritora hace lo que puede.

Concha Bracero. Nació en Estepona, Málaga, en 1961. Estudió Filología Francesa. Un contrato de profesora de Secundaria le permite disfrutar del trabajo entre alumnos y compañeros.

Laly Hernández. Es Licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de La Laguna. Gran amante de la lectura, esta es su primera incursión en el mundo de las letras.

Magnolia Medina. Nació en Tenerife en 1971. Es licenciada en Filología Hispánica. Le gusta el teatro como herramienta educativa y la lectura por diversión y por obligación moral con su profesión.

Tibisay Mesa. Siempre ha escrito aunque durante un tiempo, solo listas de la compra. Por fin, encontró a este grupo de docentes con los que comparte el placer de la palabra escrita.

Ignacio R. Alemparte. Descubrió que lo que hacía era agradable, y quiso regalárselo al mundo, que correspondió con inesperada gratitud. Este libro es prueba de ello.

José Ignacio R. Araújo. Poeta silencioso y filósofo humanista, dibujó y escribió mucho tiempo, callado, absorto, en viejos cuadernos escondidos y en la memoria de su familia.

Esther Terrón Montero. Estudió Filosofía y eso fue una buena idea. Luego se especializó en Estética, una idea aún mejor, y comenzó a dar clases sobre cosas que creía que sabía.

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