En los tiempos tan difíciles que vivimos, por culpa de las catastróficas políticas de los intereses neoliberales y la pérdida de valores democráticos, es prioritario defender y proteger en especial a aquéllos que están en una situación más débil. No obstante, parece que nuestro Alcalde-Presidente considera que debe ser de éstos de donde se deben recortar gastos.
Es por completo inaceptable que se realicen recortes en los maltrechos servicios sociales de nuestro pueblo, como ha sido el caso, y que como resultado de esta medida se paralicen la ayuda a domicilio de las personas más necesitadas o se coloque en una situación muy limitada la atención a las mujeres que han padecido el maltrato de género.
Resulta especialmente indignante y lamentable que esto ocurra cuando los sueldos de concejales, alcalde y asesores son tan altos (más de 3000€ al mes). Sería mucho exigir una bajada sensible de todos esos sueldos de los cargos electos o contratados por el ejecutivo, para poder mantener un servicio VITAL para la dignidad y el bienestar de nuestros vecinos con una vida más complicada y dura. ¿Cuáles son las prioridades del señor alcalde y sus compañeros en el consistorio?
Sean cuales fuere el motivo del cese de actividad en la asistencia a domicilio o la supresión de la oficina de la atención a las mujeres, el último y principal responsable es el Alcalde-Presidente Lucas Bravo de Laguna, pues debe ser el garante de estos derechos. Es por tanto un error inaceptable e indigno de un político que se debe a sus vecinos, probablemente causado en parte por su permanente ausencia de las tareas del ayuntamiento por su dedicación a otros cargos.
Por todo esto, la asamblea del 15M-Indignados de Santa Brígida, hace llegar a los afectados el cariño y comprensión por su situación, y exige al ayuntamiento la inmediata reparación de estas dejaciones.
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