miércoles, 8 de febrero de 2012

Programación.- El Cuyás trae a Gran Canaria lo mejor de la actual cartelera teatral

Las Palmas de GC, 08 de febrero de 2012 / Cultura - Teatro Cuyas / Gabinete de Prensa.

El Teatro Cuyás afronta la segunda parte (marzo-julio) de su temporada 2011-2012, presentada, este miércoles, por el consejero insular de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural, Larry Álvarez, y su director artístico, Gonzalo Ubani, trayendo a Gran Canaria lo mejor de la cartelera teatral del momento.

A éxitos como Noche de reyes, La omisión de la familia Coleman, Veraneantes o De ratones y hombres, protagonizados por jóvenes talentos de la escena española, se suman espectáculos encabezados por grandes estrellas como Josema Yuste, Concha Velasco o Maribel Verdú, que encabezan respectivamente los repartos de La cena de los idiotas; Concha. Yo lo quiero es bailar y El tipo de la tumba de al lado, estos últimos dirigidos por el prestigioso José María Pou. Tres espectáculos de danza y otros dos dirigidos al público familiar completan la programación del recinto grancanario para lo que resta de temporada.

Con carácter preferente, quienes deseen renovar su abono para los próximos meses podrán hacerlo en la Sala de Prensa del Teatro entre el 9 y el 15 de febrero (de lunes a viernes, de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.00 horas, y el sábado 11, de 10.00 a 13.00 horas). La venta de abonos por internet (www.teatrocuyas.com y www.entradas.com) estará disponible a partir del día 16 de febrero. Para nuevos abonados, el plazo de compra será del jueves 16 al sábado 18 de febrero, en los mismos horarios.

La venta de entradas (por todos los canales) para el público general tendrá lugar a partir del lunes 20 de febrero, lo que brinda a los abonados la posibilidad de elegir las mejores localidades con hasta 11 días de antelación con respecto al resto del público.

El mejor teatro

Basada en la comedia romántica del mismo nombre escrita por el genial William Shakespeare, la versión de Noche de reyes adaptada por Yolanda Pallín y dirigida por el hasta hace poco director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico Eduardo Vasco, será la encargada de abrir (el viernes 9 y el sábado 10 de marzo, a las 20.30 horas) esta nueva etapa del recinto gestionado por el Cabildo a través de la Fundación Canaria de las Artes Escénicas y de la Música de Gran Canaria. La acción transcurre en el fantástico reino de Lliria, cuyos habitantes están inmersos en una intensa actividad amatoria que cubre casi todo el espectro de posibles relaciones y donde, tras un naufragio, recalan por separado dos hermanos mellizos.

El dramaturgo de moda, Claudio Tolcachir, que ya abrió la primera parte de la temporada con Todos eran mis hijos, regresa al Cuyás (viernes 23 y sábado 24 de marzo, a las 20.30) con La omisión de la familia Coleman. Una familia a la que da vida la compañía argentina Timbre 4 y cuyos miembros viven en una casa que los contiene y, a la vez, los encierra. En ella, los parientes crean espacios personales difícilmente conciliables dentro de otros compartidos en los que habitan al límite de una disolución evidente y secreta, donde lo violento se instala como natural y lo patético se ignora por compartido.

Una trama que en cierta forma recuerda a la de Veraneantes. Los días 20 y 21 de abril el Cuyás se adelanta a las vacaciones con este montaje de Miguel del Arco basado en la obra homónima de Gorki. En ella, un grupo de amigos, llenos de contradicciones, parecen obligados a ser felices por el simple de hecho de hallarse, juntos, en un agradable pueblecito costero.

Miguel del Arco volverá a estar presente en el recinto grancanario los días 25 y 26 de mayo (20.30 horas) con De ratones y hombres, de J. Steinbeck. Interpretada entre otros por Fernando Cayo (George) y Roberto Álamo (Lennie), se trata de una tragedia ambientada en la gran depresión americana de los años treinta del siglo pasado. Un período que, como el actual, estuvo caracterizado por la inestabilidad de los mercados, el paro, la precariedad laboral, los desahucios…

Y del drama a la comedia: Josema Yuste, Agustín Jiménez y Félix Álvarez Felisuco repetirán en el Cuyás 10 funciones del conocido montaje La cena de los idiotas, un clásico de Francis Veber que en esta ocasión conduce magistralmente Juan José Afonso. Su reiterada presencia los días 11, 12, 13, 16, 17, 18, 19 y 20 de mayo, incluso con función doble los sábados, está de sobra justificada, dado el éxito que precede su llegada a Gran Canaria.

También el gran José María Pou tendrá un peso importante al final de la temporada, al dirigir los espectáculos Concha. Yo lo que quiero es bailar, protagonizado por Concha Velasco, y El tipo de la tumba de al lado, con Maribel Verdú y Antonio Molero.

Con texto de Juan Carlos Rubio, sobre la biografía y el relato oral de la propia Concha, el primero (estará en el Cuyás del 15, 16 y 17 de junio) muestra a la Velasco en estado puro, hablando sin intermediarios, con música en directo y frente al público, de su carrera, sus personajes, las obras que ha hecho (y las que no) de sus éxitos y sus fracasos.

El tipo de la tumba de al lado, montaje de K. Mazetti versionado y dirigido también por Pou cierra la programación. Dafne (Maribel Verdú), una intelectual urbana; Beni (Antonio Molero), un granjero de provincias. Ambos se sienten solos hasta que sus vidas se cruzan ante el poco propicio marco de un cementerio. Un auténtico tratado sobre las diferencias sociales y culturales entre los seres humanos, del que un crítico de Le Figaro dijo: “en el teatro a veces se producen pequeños milagros. Es el caso de esta obra”. El público del Cuyás podrá presenciarlo los días 29 y 30 de junio (20.30 horas) y 1 de julio (19.00).

Danza por partida triple

Tres son los espectáculos de danza que plantea el Cuyás para lo que resta de temporada: La muntanya al teu voltant (única función, el sábado 14 de abril a las 20.30 horas), La Bella Durmiente sobre hielo (del 1 al 6 de mayo, a las 20.30 horas, salvo el viernes 4 y sábado 5, cuando habrá función doble -18.00 y 21.30 horas-) y el domingo 6, a las 18.00 horas) y Carmen (1 y 2 de junio, a las 20.30 horas).

De la compañía de danza Gelabert Azzopardi, en colaboración con Perejaume, el primero gira en torno a uno de los “misterios” que más fascinan al coreógrafo catalán: la presencia del bailarín y su relación con la coreografía y el colectivo. “Así como un árbol es algo individual o parte de un bosque, la presencia es algo personal o el resultado de una interrelación con los otros”, afirma Cesc Gelabert, quien busca en la sardana (una docena de sardanistas participan en el montaje) respuestas a preguntas del tipo: “¿cómo estar al entorno y en el centro de una montaña?”.

El escenario del Cuyás se convertirá en una gran pista de hielo sobre la que durante más de dos horas de brillante espectáculo patinará el Imperial Ice Stars Ballet al ritmo de La Bella Durmiente de Tchaikovsky. La historia es conocida por todos, pero el montaje, que reúne a 24 patinadores que en total suman más de 200 medallas obtenidas en campeonatos mundiales, europeos y nacionales; los espectaculares decorados diseñados por Eamon D’Arcy (destacado escenógrafo australiano) y el centenar de trajes diseñados por Natella Abdulaeva, no dejarán indiferente a los espectadores, como tampoco lo hará la versión de Carmen a cargo del Ballet de Teatres de la Generalitat Valenciana, coreografiada y dirigida por Ramón Oller.

Y el Cuyás más familiar

Con el patrocinio de la Fundación Mapfre Guanarteme, dos espectáculos componen la programación familiar del Cuyás para lo que resta de temporada: Clown Quijote de La Mancha (17 de marzo, a las 18.00 horas) y La niña Farola, éste último a cargo del ballet de Carmen Roche (28 de abril, 18.00 horas).

De mano de la ganadora de un Max al Mejor Espectáculo Infantil y de siete premios en la Feria Europea de Teatro Para Niños y Niñas (FETEN), Uroc Teatro, llega al Cuyás Clown Quijote de La Mancha, versión para niños de 5 y 12 años de la novela de Cervantes. Se trata de un espectáculo pedagógico lleno de humor y canciones para, según sus creadores, potenciar y transmitir la visión positiva y vitalista que Cervantes tenía del mundo. Por su parte, el ballet de Carmen Roche cuenta, a través de una danza pensada para todos los públicos, la historia de Lola, que ostenta un don muy particular: absorbe la energía de todos los aparatos eléctricos. Lo que a priori pudiera parecer divertido, la hace sentirse extraña, le impide hacer amigos y la lleva a refugiarse tras un ordenador, hasta que un día ella y su familia se mudan a un barrio con un parque en el que descubre el verdadero sentido de la amistad, así como la importancia de disfrutar de la vida real.

Ambas contarán, además, con funciones en horario escolar, dentro de Teatrae, el proyecto pedagógico del Cuyás, que también incluye seis representaciones del espectáculo Teranga: el legado de los griots de Senegal, patrocinado por la Obra Social de la Fundación La Caixa.

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