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domingo, 17 de enero de 2016

El fino oído de las cabras guaniles...

Las Palmas de Gran Canaria (Canarias), 17 de enero de 2016 / Artículo de Opinión / Fernando Báez 

Que sus amos, desde la parte alta del Valle de Agaete, a las que se han subido hasta Tamadaba, por donde las mataba el cabildo, por donde Berbique, hacen sonar un poco de millo en un cacharro al aire o viento, y al rato tiene a las cabras a sus pies. Esto, ha sido confesión -no sacramental- del dueño de algunas de esas cabras que se las han matado, como comida -así me dijo- para dos parejas de cuervos que existen en la zona; para tan pocos cuervos hasta 70 cabras, ¿será para que también mueran reventados? Mis amigos, poco a poco van saliendo verdades como éstas, y eso que no tiene uno conexión directa, sino voces de amigos que te piden no los descubras, por el secular miedo a represalias o venganzas. 

Pues lo dicho, cabras las guaniles de tan fino oído, que aún a gran distancia, en el silencio de los riscos, escuchan a sus amos, que con un poco de ración las llaman. El cabildo las llama asilvestradas; son guaniles, y se las matan a sus legítimos dueños, que por no tenerlas censadas, librándolas así de infecciones y otras enfermedades, los multan, y por eso callan, y nada reclaman, porque los multarían de forma exageradísimas y abusivas en extremo, y por eso prefieren callar, pero te dicen verdades, como la de las cencerras, que les han quitado una vez matadas; éstas y otras, que poco a poco irán saliendo, o les iré contando. 

Por hoy, quede este testimonio de unas cabras tan finas de oído, que casi es imposible acercarte a ellas, te sienten de lejos y huyen, y la prueba es, que han sido tiroteadas por los españoles de doñana, a la distancia más de un kilómetro, pues a menos no te puedes acercar, a no ser se trate del dueño o amo, al que sí conocen a la legua, y a más distancia, y basta con el clásico “¡jaira, jairita...!” y veloces acuden a la voz de sus amos (pero, el cabildo sin autorización, sin consentimiento y mucho menos con el mandato expreso y visto bueno de Europa, las matan). Pues ya ven lo fácil que es apañarlas, basta que el cabrero con un cacharro con un fondo de millo, que suene, y acuden saltando sus cabras riscos y peñas abajo (a donde vuelven), porque la cabra, conoce a su amo o pastor, como bien dijera Jesús nuestro Dios y Señor.

El Padre Báez, avanzando en datos e información que otros callan o silencian, pero que no por ello deja de ser menos cierto, pues cuanto digo o afirmo (y estoy solo en los prolegómenos [o comienzos]) es fácilmente comprobable, bastaría con una pregunta al aire en el Valle (de Agaete) y verían mucho más que lo que aquí solo apunto breve y parcialmente.

“... empobrecemos y pasamos hambre...” (salmo 33).

El “COLECTIVO SALVEMOS LAS CABRAS”, nace con el objetivo principal de hacer cambiar de opinión al cabildo que mata a las cabras, y desista de ello comprometiéndose no seguir con esa política antiganadera. A tal fin, necesitamos la suma de asociaciones, grupos, otros colectivos, medios, individuos, etc., que apoyen y se sumen a nuestra reivindicación: ¡dejen tranquilas y libres a nuestras cabras, y no maten ni una más!

viernes, 15 de enero de 2016

El mal ejemplo ya cunde...

Gran Canaria (Canarias), 15 de enero de 2016 / Artículo de Prensa / Fernando Báez.

... y si Europa no para de mandar dinero a los de los cabildos tabaiberos, defensores de endemismos inexistentes, pero que les sirven de pretexto para llenar sus arcas de dinero europeo para una flora futurible, nos quedamos sin cabras, pues ya va la cosa por Fuerteventura, y ello a tiro limpio. Como la cosa sea imitada por el resto de las islas, las endémicas cabras que nos quedan desaparecerán como han desaparecido los cuervos, y otras especies animales, porque les han dado por lo verde y plantas estériles, que por culpa de ellas, y que no prenden dado el cambio climático, nos quedamos sin flora, y de paso también sin fauna. Por lo pronto salvando la perralla, perruna, o canina, lo que es de las cabras, en poco no oiremos más un valido de ellas. Y esto, por lo visto ya, no hay quien lo pare. 

¡Menuda entrada de dinero europeo, para acabar con la leche -salvo la de tabaibas- y así nuestra dependencia sea total en cuanto leche y carne del exterior, como de los otros todos productos! Es decir, lo último y único que nos quedaba; las cabras, van a exterminarlas, van a acabar con ellas los de los cabildos, porque los endemismos inexistentes, y que si existieran existen gracias y a pesar de las cabras, desapareciendo éstas, nos quedaremos sin nada (sin fauna y sin flora, sin plantas y sin animales). 

Pues, la revolución contra las cabras, y ello a cañonazos limpios, rifles y escopetas. La guerra contra las cabras, marcará en la Historia del Tabaibal esta década. Pues así se escribe la Historia. Nerón destruyó Roma, y los cabildo del Tabaibal, acaban con una raza única, la mejor cabra del mundo. Y todo por salvar unos pinos, que ellos dicen se los comen las cabras y encima los llaman (a los pinos), endémicos o endemismo. Y el borreguismo comprado, calla, con el silencio de los corderos (que aunque los maten, no dan un valido). 

Anécdota real: sucedió en 1981 que sustituí en verano al cura de una parroquia en Fuerteventura (Casillas del Ángel) y se hablaba de un pinar en Betancuria, quise visitarlo y pregunté en el pueblo que dónde estaba el pinar, pues por más que miraba a las lomas, no veía nada verde, y me dice la interlocutora: “¡mire, me llamo pino, con otras dos que se llamen igual, si nos juntamos ya somos el pinar!” Es decir: allí no había ningún endemismo, salvo las julagas (ahulagas), las mismas que le daban al queso de cabra un sabor amargo característico de muy buen sabor y tipismo. Anécdota parte: ¿se comen las cabras de Betancuria los pinos?

El Padre Báez, suplente y prestador de su voz, de cuantos defensores de los animales, grupos ecologistas, y demás hierbas compradas y calladas, incluidos nacionalistas, independentistas, laicistas, etc., que por llevar esta bandera un cura, miran para el cabildo y le dicen: ¡sí guana! Pues, ¡guárdenme una cría de cada uno de ellos!, que yo sigo mi lucha capitaneando a los sin siglas, ni pertenencias a grupos adictos a los cabildos, con la masa o pueblo que me sigue, y ello, ¡gracias a Dios! Y a este fin, siguen algunas citas bíblicas:

“... ¿quién nos librará de las manos de los que nos traen toda clase de calamidades?...” (1Sm. 4, 1-11). / “... retroceden ante el enemigo que nos saquea...” (salmo 43). / “... pezuñas de cabras, en las alturas...” (salmo 17). / “... irracionales como caballos y mulos...” (salmo 31).