LAS ESCUELAS INFANTILES DE SANTA LUCÍA UN MODELO A SEGUIR

Telde (Gran Canaria), 20 de agosto de 2012 / Artículo de Opinión / Alejandro Ramos Guerra

El pasado martes 14 de agosto, se logró materializar con éxito la firma del nuevo acuerdo laboral entre las trabajadoras de las Escuelas Infantiles y el Ayuntamiento de Santa Lucía que garantiza la continuidad de las mismas, dando estabilidad laboral a las trabajadoras y sus familias.

Desde el año 2011, la Comunidad Autónoma de Canarias retiró la subvención que venía abonando a la Fundación Escuelas Infantiles de Santa Lucía S.A. para el mantenimiento de las Escuelas Infantiles del municipio. La coyuntura nueva abocó a estos centros a una situación económica muy complicada pero no insalvable, como se ha demostrado con el acuerdo.

Hasta esa fecha, las Escuelas Infantiles de ese municipio, a groso modo se sostenían económicamente por 1/3 del presupuesto que lo aportaba el Ayuntamiento, 1/3 el Gobierno de Canarias y 1/3 los padres. La retirada del dinero del Gobierno de Canarias supuso que había que cubrir un tercio del presupuesto. Pero lo importante de éste acuerdo radicaba en que las partes negociadoras apostaban por un servicio público y de calidad, cuando lo fácil hubiese sido privatizar y externalizar siguiendo la “moda” que se ha practicado en Gran Canaria en esta materia.

Un tema tan importante como son los niños y su educación, unido a la defensa del empleo (más aún cuando en el contexto económico actual lo público está siendo denostado), ha hecho posible un acuerdo con la apuesta por este proyecto educativo y el sostenimiento de las Escuelas Infantiles de Santa Lucía como servicio público. El Ayuntamiento de Santa Lucía aumentará su aportación económica anual, los padres incrementarán sus cuotas y los trabajadores sacrificarán una parte importante de sus retribuciones, suspendiendo derechos que se contemplan en el convenio colectivo.

El presente acuerdo además venía con una complejidad añadida en términos jurídicos: Adaptar las condiciones de trabajo a las imposiciones que afectan del Real Decreto-ley 20/2012, de 13 de julio, de medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad, que se ha hecho muy famoso por quitar una paga extraordinaria en diciembre a los funcionarios o su valor porcentual baremado sobre un 7% pero que engloba medidas muy duras al personal laboral de empresas públicas. Este Real Decreto-ley, da la posibilidad de anular o suspender convenios colectivos, modificar complementos en las bajas médicas, reducir permisos y anular cualquier acuerdo que contradiga el acuerdo o exista peligro de déficit.

El acuerdo ha supuesto un éxito, demostrando que los servicios públicos tienen sentido, más aún cuando vienen acompañados del mantenimiento del empleo. En éste sentido, cabe destacar que por período de un año, se suspende el convenio colectivo, se garantizan los puestos de trabajo y que las trabajadoras, una vez han perdido una paga extraordinaria por culpa del “Decretazo de Rajoy”, han cedido la paga extraordinaria de verano, el plus de destino y una reducción del 4% para equilibrar la parte que falta del Gobierno de Canarias.

Para mí ha sido un orgullo participar como asesor en la dura negociación del presente acuerdo junto a Juan Miguel Suárez Santana de CCOO. Desde aquí quiero darle las gracias a todo el comité de empresa: Dña. Teresa Arbelo Artiles en calidad de presidenta del comité de empresa (UGT), Dña. Josefa Verde Benítez (UGT), Dña Dolores Galván Vera (UGT),Dña Lourdes Delgado Ortega (CCOO),Dña. Soraya Vera Bueno (CCOO) y a todas las trabajadoras de la Escuelas Infantiles por su apoyo sincero y constante.

Además de darle las gracias a Gustavo Santana y David Mosquera en calidad de Secretario General de UGT-Canarias y UGT-Gran Canaria respectivamente por su designación para que dirigiese la parte jurídica del presente acuerdo que ha cambiado la inercia de la privatización y externalización de las Escuelas Infantiles de Gran Canaria, así como a la concejala de educación y al grupo de Gobierno de Santa Lucía de Tirajana.

¿Tienen algún plan para después del 20-N?

Telde, 01 de Noviembre de 2011 | Opinión | ALEJANDRO RAMOS GUERRA (*)

Estos días que vivo con especial intensidad mi condición de socialista acudiendo a diferentes actos organizados por el partido de cara a las elecciones generales, me siento más identificado que nunca, si cabe, con formar parte de un proyecto político de una estructura fuerte, arraigada y con convicciones. Lejos de intentar vender humo, dar gato por liebre, o eludir nuestra responsabilidad, el PSOE actualmente, afronta con entereza y determinación, la difícil coyuntura económica que nos ha tocado vivir.

Podríamos detenernos en hacer un análisis exhaustivo y minucioso de los diversos condicionantes económicos que nos han conducido a la situación actual. Pero ni yo soy economista, ni trato de aburrir con datos y números a la gente, principalmente porque a la inmensa mayoría de la sociedad, ni le importa, ni lo entendería jamás. Solo conviene recordar, que la situación de crisis es global, o sea, que se padece internacionalmente, no solo España, como tratan de dibujar los partidos, que sin proyecto político, aspiran a gobernar sin alternativas o plan de actuación.

No me gusta la idea de centrar un artículo exclusivamente en la crisis económica, pero entiendo que por su virulencia y tremendas consecuencias, es lo que por responsabilidad, toca. Me considero una persona sencilla y cercana a la gente, y por mi condición de sindicalista (amén de mi corta trayectoria política), conozco muchos casos en primera línea, de personas que están sufriendo muchísimo, por problemas económicos. Familias con dificultades para pagar el alquiler, la luz, el agua, o algo tan esencial pero fundamental, como la comida. No descubro nada nuevo a estas alturas, pero a todos los que me quieren escuchar, les digo que esta situación es eventual, y que con un gobierno preocupado en las políticas sociales como el que propone el PSOE, no solo saldremos antes de la misma, sino que además lo haremos fortalecidos.

Considero que la esencia de la política y la base de la democracia, es la alternancia en el poder. De igual forma, soy enemigo de mayorías absolutas y todo lo que suponga gobernar “sin control”. Quiero decir con esto, que si el próximo 20 de noviembre, la mayoría de los españoles consideran oportuno, confiar la responsabilidad de gobierno de España a cualquier otro partido que no sea el PSOE, lo consideraré lícito, algo normal en un estado de derecho como el nuestro. No supondrá ningún drama para los socialistas de bien, afortunadamente, la inmensa mayoría de nosotros. Aceptaremos la voluntad general, pero eso sí, lo único que pido, es que los votantes no vayan engañados o confundidos a la cita electoral porque les hayan machacado en la cabeza, que la crisis es culpa del PSOE, que solo existe en nuestro país, y que la solución la traen otros “bajo el brazo”, como si estuvieran dotados del poder de una varita mágica para solucionarlo, porque eso es totalmente falso.

La experiencia que he vivido estos días al lado de referentes del partido, como Juan Fernando López Aguilar, o el candidato a la presidencia del Gobierno de la nación, Alfredo Pérez Rubalcaba (entre otros), me ha servido para refrendar lo que ya sabía; solo la izquierda puede representar el avance de este país, sin desproteger los derechos sociales e individuales de los más desfavorecidos, la igualdad social, o la libertad intelectual y cultural de las personas. Somos más, por eso pretendo poner mi granito de arena que ayude a movilizar al mayoritario electorado de izquierda de este país, en un momento crítico de nuestra historia. Que nadie logre la victoria con mentiras y confusión, sembrando miedo y desazón. Que no aprovechen la debilidad económica para jugar con la ideología de la gente, y que no digan que tienen la solución, porque eso es mentira. Propongo para terminar, que los lectores se formulen una pregunta, y mediten muy bien la respuesta. Para los que siembran el desánimo y alimentan el terror dibujando un panorama sin solución ¿tienen algún plan para después del 20-N?. Yo diría que no.

(*)es candidato al Congreso de los Diputados por el PSC-PSOE y militante de la Agrupación Juan Negrín.