Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han procedido a la desarticulación de una organización criminal asentada en la isla de Gran Canaria, dedicada a la distribución de importantísimas cantidades de cocaína y hachís en todo el archipiélago canario.
Esta organización estaba dirigida por un individuo cuyo centro de operaciones lo tenía instalado en el conocido barrio del Polígono de San Cristóbal de Las Palmas. Allí almacenaba distintas cantidades de sustancia estupefaciente, que posteriormente eran repartidas a numerosos puntos de la isla a través de otro individuo, considerado como su mano derecha, quien en unión de su esposa se dedicaba a repartir entre numerosos traficantes, importantes cantidades de droga.
A este último le fueron intervenidos en el momento de su detención 200 gramos de cocaína en uno de sus bolsillos. Además, disponía de un arma de fuego con la que se proporcionaba a sí mismo cobertura y seguridad en las transacciones de droga que él mismo realizaba. En el momento de la intervención del arma, fue encontrada con munición en su cargador y preparada para disparar.
Igualmente, se procedió a la detención de otros dos miembros de la organización, que formaban parte de la estructura criminal investigada, y cuyo papel consistía en adquirir importantes cantidades de cocaína de la organización, cocaína ésta que posteriormente repartían entre numerosos consumidores de la isla.
Fruto de la operación practicada por funcionarios de la UDYCO de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Las Palmas, se llevaron a cabo 4 registros domiciliarios donde fueron incautados 88 kilos de hachís, 4.475 monodosis de cocaína, un arma de fuego con munición, una pistola eléctrica, numerosos utensilios de corte y pesaje de droga, tres vehículos de alta gama y más de 22.000 euros en metálico.
Fueron detenidos D. G. M. de 35 años, con varios antecedentes, C. R. A. N. de 33, P. J. G. R. de 36 y V. M. C. M. de 40, estos tres últimos sin antecedentes y todos naturales de Las Palmas.
La droga intervenida hubiese generado al detenido en el mercado ilícito un beneficio cercano a los 450.000 euros.
Finalizadas las diligencias policiales, fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial, que decretó su ingreso en prisión.
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