viernes, 9 de marzo de 2012

Ayer más que nunca gritamos alto y muy alto que no se recorte ni un solo derecho a la mujer

Las Palmas de GC, 9 de marzo de 2012 / Artículo de Opinión / ANTONIO RODRIGUEZ SUAREZ (*)

El Día Internacional de la Mujer, se hace más necesario que nunca que todos hagamos una reflexión sobre la lucha histórica de las mujeres para conseguir la igualdad social y laboral con los hombres y denunciar el papel que algunos hombres están haciendo para que los derechos de las mujeres se retrotraigan a hace mas de 40 años.

Sin duda alguna la mujer hoy día ha conseguido unas cotas de igualdad, de integración laboral, de formación, preparación y de protagonismo político y social como no ha tenido jamás en la Historia. Lo que es inconcebible es que con toda esta lucha de tantos años de las mujeres, ahora, a través de imposiciones, a través del BOE, se quiera quitar leyes que en los últimos tiempos, bajo mi punto de vista, han sido los que han contribuido sin duda alguna a que las mujeres tengan más oportunidades de poder transmitir a la sociedad toda la capacidad y todo el esfuerzo que durante toda su historia han demostrado día a día.

¿Y por qué digo esto?. Digo esto porque me parece que es una canallada el querer descafeinar maquillar, o retirar directamente leyes tan importantes como la Ley de Paridad en cargos públicos, la ley de conciliación de la vida laboral y familiar. La quieren descafeinar y evidentemente eso será un obstáculo para que la mujer se incorpore cada vez más al mundo laboral. O lo que es más grave, se quiere quitar una ley tan importante como la Ley del aborto que poco más o menos lo que nos quieren imponer es que los hombres decidamos sobre un derecho que yo entiendo que es solo y exclusivo de la mujer.

Ante estos graves atentados hoy más que nunca hay que gritar algo y muy alto que las mujeres tienen que seguir luchando y ahora más que nunca salir a la calle para que no se les quiten todas aquellas conquistas que han conseguido. Y que desde una visión fundamentalista y con tintes religiosos quieren que la mujer vuelva a ser un objeto, un florero, y no un ser humano con los mismos derechos y las mismas obligaciones que tiene un hombre.

Por tanto la sociedad tenemos una deuda pendiente, no solo con las mujeres que hoy en día trabajan, dentro y fuera de la casa, llevan el peso de una familia, se tienen que preparar más todavía que los hombres y tienen que luchar más que éstos para poder obtener un puesto o un trabajo en esta sociedad que hoy día tiene todavía tintes machistas.

Por eso todos, hombres y mujeres tenemos que luchar para que la igualdad sea algo real y los derechos se consoliden y no se recorten.

Por últimos felicitar a todas y cada una de las mujeres, madres, hermanas, hijas, y de más parentescos, parejas y compañeras o amigas. Son ustedes lo mejor de esta sociedad y por eso quiero que sepan que no están solas en estos tiempos tan complicados y difíciles que se viven y que están por venir, sino que estamos muchos hombres al lado de ustedes para continuar trabajando día a día porque la palabra igualdad sea igualdad sea una realidad y no una utopía.

(*) SECRETARIO GENERAL DE SITCA

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